Bianca Ossola
La primera parte de la Copa del Mundo que se desarrolló en Australia y Nueva Zelanda dejó grandes sorpresas para los seguidores del fútbol femenino.
La eliminación de Brasil y Alemania, fueron la más resonantes. Nueva Zelanda, uno de los organizadores, también dijo rápidamente adiós.
La selección de Brasil, vigente campeona de América, empató sin goles ante Jamaica en la última fecha de la fase de grupos e instaló la sorpresa mundialista. La Canarinha, dirigida por la sueca Pia Sundhage goleó a Panamá (4-0) y perdió ante Francia (1-2).
El equipo suramericano, que ha participado en las nueve ediciones de Mundial femenino disputadas hasta la fecha, solo había sido eliminado en la fase de grupos en dos ocasiones (1991 y 1995).
Otra de las selecciones históricas del certamen mundialista es Alemania y también se despidió en fase de grupos. Dos veces consecutivas campeonas del Mundo (Estados Unidos 2003 y China 2007), y número dos del ranking mundial, fue eliminada por primera vez en la historia en la primera fase.
Canadá también dijo adiós y por primera vez la vigente ganadora de los Juegos Olímpicos quedó eliminada del Mundial Femenino en fase de grupos.
Además, equipos de las seis Confederaciones que compiten por el trofeo ganaron un partido en el torneo. Nueva Zelanda se convirtió en el primer equipo de Oceanía en registrar una victoria, mientras que Filipinas, Zambia, Portugal, Jamaica, Sudáfrica y Marruecos también obtuvieron su primera victoria.
Jamaica y Marruecos, selección debutante, clasificaron por primera vez a los octavos de final.
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