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El gobierno duplicó los topes de facturación de monotributistas

La categoría mínima pasa a $48 mil anual, el límite del sector servicios a 400 mil y la transacción de bienes muebles a 600 mil.


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El gobierno nacional duplicó las escalas de facturación del régimen de monotributo, con retroactividad al 1º de septiembre último, haciendo lugar al reclamo de pequeños y medianos empresarios de distintos sectores. El titular de la Afip, Ricardo Echegaray, precisó que el límite para los monotributistas del sector servicios pasa de 200 mil a 400 mil pesos, mientras que para la transacción de bienes muebles sube de 300 mil a 600 mil pesos. En tanto, la categoría mínima se eleva a 48 mil pesos anuales.

Según explicó ayer el funcionario, la recategorización que opera este mes “va a tener en cuenta estos nuevos parámetros”. Además, puntualizó que son monotributistas 2.250.338 personas en todo el país, de los cuales poco más de un millón y medio son “monotributistas puros”, es decir, no tienen en paralelo una actividad en relación de dependencia.

Echegaray expuso la nueva escala del régimen de monotributo al comenzar el tercer encuentro del diálogo social-empresario convocado ayer al mediodía por la presidenta Cristina Fernández de Kirchner en la Casa Rosada.

El titular de la Afip aseguró que las modificaciones, que significan duplicar el límite actual de facturación, fueron posibles gracias a “la mayor capacidad en los controles tributarios”.

La medida se pone en marcha este mes, según indicó el  funcionario, tras destacar que las modificaciones se tomaron en el marco de “un esquema de recaudación de inclusión, como el monotributo, para que no se vea ensuciado, entorpecido, por aquellos que tienen una elevada capacidad patrimonial y terminan perjudicando a la mayoría”.

Echegaray aclaró que se hizo una modificación general, que incluye a los artesanos, por lo que se implantó una nueva escala general en el nivel de facturación de los contribuyentes.

El titular de la Afip diferenció a “los pequeños comerciantes”, los monotributistas puros que suman 1.510.266 personas, y a las 740.072 personas que están en relación de dependencia y desarrollan “emprendimientos menores que se inscriben en monotributo”, que, según indicó el funcionario, forman parte de la economía formal, porque están registrados.

A partir de ahora la categoría B, que es la más baja (en 2010 se unificó con la A), es para quienes facturan hasta 48 mil pesos (antes era hasta 24 mil anuales); la C, hasta 72 mil pesos; la D, hasta 96 mil; la E, hasta 144 mil; la F, hasta 192 mil; la G, hasta 240 mil; la H, hasta 288 mil y la I, hasta 400 mil.

Las otras tres categorías, exclusivas para la producción de bienes, son la J, hasta 470 mil pesos anuales; la K, hasta 540 mil; y la L, hasta 600 mil pesos.

Al defender el anuncio, Echegaray dijo que “el beneficio” alcanzará al 34 por ciento de los monotributistas de todo el país. Indicó también que el 34 por ciento de los monotributistas están radicados en la provincia de Buenos Aires (unas 762 mil personas); mientras que otros 384 mil están en la ciudad de Buenos Aires. Por cantidad de monotributistas siguen en orden decreciente Córdoba, Santa Fe, Mendoza, Entre Ríos, Misiones, Tucumán y el resto de las provincias del país.

Cristina: “Que nadie tenga miedo a decir lo que piensa”

En una nueva ronda de diálogo político, la presidenta Cristina Fernández recibió ayer a empresarios y sindicalistas en la Casa Rosada, pidió “que nadie tenga miedo de decir lo que piensa” e ironizó: “No me voy a comer a nadie”. La jefa del Estado se expresó de este modo durante la reunión donde además se anunciaron cambios en el monotributo (ver nota principal) y mayores aportes a obras sociales (ver aparte).

Sin mencionarlo, la mandataria hizo alusión al titular de la UIA, Héctor Méndez, al sostener: “No tengamos miedo a decir lo que pensamos…”. Méndez se quejó días atrás de los encuentros tripartitos y criticó al ministro de Economía Hernán Lorenzino. Anoche la presidenta encabezó la cena por el Día de la Industria en Tecnópolis organizada por la Unión Industrial, y Méndez tampoco estuvo presente porque se encuentra de viaje con su familia.

En la cumbre, nadie se salvó de las observaciones de la presidenta y el sindicalismo también tuvo lo suyo: fue cuando Cristina se remitió al reclamo vinculado al sector monotributista. “Debo decirlo, los monotributistas que no eran bien atendidos en las obras sociales”, sostuvo. Y, apuntando a los hombres de negocios, dijo que “hay quejas concretas de pymes que cuando hacen denuncias luego terminan perjudicadas, porque las grandes empresas tienen posición dominante, con prácticas monopólicas y oligopólicas en la producción de insumos básicos y difundidos, como en la fabricación de productos para la canasta familiar”.

A su turno, el titular de la Came, Osvaldo Cornide, señaló que Cristina les dijo que “no va a devaluar”, y ratificó el rumbo económico.

Por otro lado, en el marco del diálogo, el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, convocó para hoy a las 12, en la sede de la cartera laboral, a sindicalistas y empresarios a integrar la comisión contra el trabajo no registrado.

El de ayer fue el tercer encuentro convocado por el gobierno en el marco del diálogo político, luego del que abrió la ronda en Río Gallegos el 21 de agosto. Una semana después se realizó el segundo encuentro en Casa de Gobierno, en cuya apertura Cristina anunció el aumento del piso del mínimo no imponible de Ganancias a 15 mil pesos brutos.

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