El oficialismo aprobó ayer en el Senado y giró a la Cámara de Diputados el paquete de proyectos para regular las relaciones entre consumidores y empresas y modificar la ley de Abastecimiento. En tanto, las declaraciones del titular de la UIA, Héctor Méndez, quien comparó al gobierno con la dictadura, generaron el rechazo de funcionarios nacionales, mientras que sus pares tomaron distancia de sus polémicos dichos. El industrial había afirmado que “la mayoría absoluta” del kirchnerismo en el Congreso le recordaba “a la dictadura y la famosa obediencia debida”.
La iniciativa que plantea una regulación de las relaciones de producción y consumo con modificaciones a la ley de Abastecimiento, la más resistida por la oposición y las grandes cámaras empresarias, fue aprobada con 38 votos a favor y 27 en contra, al igual que la que crea el Observatorio de Precios y Disponibilidad de Bienes y Servicios.
En tanto, el proyecto que crea un fuero judicial especial para dirimir conflictos entre usuarios y empresas fue apoyado en la votación en general por la UCR y resultó aprobado con 53 votos a favor y 11 en contra.
El santacruceño Pablo González fue el miembro informante del bloque oficialista y subrayó que “el 99 por ciento de las empresas del país son micro, pequeñas y medianas empresas”, que no son contempladas por la reforma siempre que no tengan posición dominante en el mercado.
“Una acusación temeraria”
Por otro lado, el jefe de Gabinete Jorge Capitanich calificó ayer como “una falta de respeto” y “una acusación temeraria” las declaraciones del presidente de la UIA, Héctor Méndez.
“Catalogar como una dictadura a la mayoría en el Congreso del Frente para la Victoria constituye una acusación temeraria, absolutamente infundada y es una falta de respeto a una institución de la democracia, a un partido político, a un frente o a una alianza electoral”, indicó el funcionario.
Además, Capitanich llamó a Méndez “mascarón de proa” de “los grandes grupos económicos” que lo eligen “para que diga lo que ellos no se animan a decir”, y agregó que “una acusación de esta naturaleza merece el repudio”.
Por su parte, el ministro de Planificación Federal Julio De Vido calificó de “provocación” las afirmaciones de Méndez y las comparó con las que promovieron en el pasado “golpes militares”.
“Los agravios y descalificaciones de Méndez a legisladores del Frente para la Victoria y ministros son provocación, como las que vienen exhibiendo hace algunos días las mismas corporaciones, y algunos personajes antediluvianos que en el pasado no dudaron en promover golpes de Estado cuando no pudieron imponer sus políticas”, sostuvo el funcionario.
De Vido afirmó que el empresario “anhela volver al país que cerró 75 mil empresas y dejó 25 por ciento de desocupación”.
Colegas se despegan
El presidente de la Cámara de la Construcción (CAC), Gustavo Weiss, y uno de los vicepresidentes de la UIA, José Urtubey, se distanciaron ayer de las polémicas palabras de Méndez.
Urtubey destacó que la Argentina “vive una democracia institucional notoria” y pidió “no dramatizar tanto” con relación a la reforma de la ley de Abastecimiento.
En declaraciones radiales, comentó: “Por lo general no soy exégeta de terceras personas, pero considero que Argentina y este gobierno vive una democracia institucional notoria”.
Por su parte, Weiss cuestionó a su par de la UIA por sus críticas al gobierno, aunque también fustigó a esa iniciativa oficial, que le permite al Poder Ejecutivo, según dijo, “hacer lo que quiera”.
“Habría que preguntarle al presidente de la UIA lo que quiso decir. Creo que se refirió a que muchos de los senadores que levantan la mano por el oficialismo están de acuerdo con esa ley, pero otros levantan la mano por obediencia partidaria. Yo no hubiera nombrado jamás la palabra dictadura”, sostuvo.
Avanzó ley de Pago Soberano
El Senado aprobó y envió a la Cámara de Diputados el proyecto de ley impulsado por el Ejecutivo para el pago local de la deuda externa con los bonistas que ingresaron a los canjes de 2005 y 2010, tras un extenso debate que duró más de nueve horas. La iniciativa fue aprobada por 39 votos a favor y 27 en contra, con las abstenciones de Fernando “Pino” Solanas y de Magdalena Odarda.
El proyecto propone declarar de interés público la reestructuración de la deuda 2005-2010 y el pago soberano local, que comprenda al ciento por ciento de los tenedores de títulos públicos de la República Argentina, en condiciones justas, equitativas, legales y sustentables. Además, crea en el ámbito del Congreso una comisión bicameral permanente de investigación del origen de la deuda externa.
El oficialismo buscará darle tratamiento exprés a ambos proyectos
Luego de recibir los proyectos con la aprobación del Senado, el oficialismo de la Cámara baja prevé un tratamiento veloz de la ley de Pago Soberano y de la reforma de la ley de Abastecimiento, iniciativas que estarán listas en diez días.
La próxima semana se concentrará el trabajo más importante, ya que se llevará a cabo el período de discusión y comisión, previo a la llegada al recinto.
El bloque de diputados nacionales del Frente para la Victoria podría convocar para este lunes a organizaciones de consumidores y cámaras empresarias para analizar el proyecto que plantea modificaciones a la actual ley de Abastecimiento, aunque todavía no se habían cursado las invitaciones.
El martes, en tanto, será el momento de la visita del ministro de Economía, Axel Kicillof, que explicará el proyecto de reforma y también abordaría el Pago Soberano, una norma que plantea reabrir el canje de la deuda y también modificar la jurisdicción de pago.
Podrían acompañar a Kicillof otros funcionarios nacionales para completar las exposiciones.
Ese mismo día, las comisiones de la Cámara baja trabajarán arduamente para firmar el despacho de comisión de las dos propuestas del Poder Ejecutivo, que ya quedarán en condiciones de bajar al recinto.
Según integrantes de la bancada oficialista, la idea es tratar la iniciativa de la deuda este miércoles, en una sesión especial que promete ser maratónica, ya que existen fuertes resistencias al proyecto dentro de la oposición en la Cámara baja.
En tanto, la sanción de la reforma de la ley de Abastecimiento quedará para el miércoles 17, cuando el kirchnerismo convocará a una nueva sesión especial.
El Frente para la Victoria, que no tendría inconvenientes para aprobar las dos iniciativas y convertirlas en ley, quiere cumplir rápidamente con el mandato del Poder Ejecutivo, que con estas propuestas busca hacer frente a dos focos de conflicto para el país, la cesación de pagos y los precios.
En el medio está previsto que el lunes 15 de septiembre ingrese a la Cámara baja el proyecto de Presupuesto 2015, la previsión de ingresos y gastos para el último año de gestión de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner.
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