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El debate está encarrilado

Por Pablo Moscatello.- Concejales reciben hoy a la directora del Ente de la Movilidad, Mónica Alvarado, para conocer detalles del proyecto de carriles exclusivos para el transporte público en la avenida Alberdi.


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El expediente con el pedido de la firma Transatlántica que construye el hotel sobre unos viejos silos en Puerto Norte para ampliar los metros cuadrados de edificación no logró definiciones ayer en el Concejo. La comisión de Planeamiento no reunió quórum para trabajar y así el tratamiento del tema se volvió a postergar. En tanto, hoy a las 11, como informó El Ciudadano, se avanzará sobre el proyecto de los carriles exclusivos en avenida Alberdi.

Ayer, los comerciantes de esa arteria salieron a presionar para que no haya grandes cambios a lo que está previsto y así se pueda estacionar en esa arteria.

Con la campaña electoral para renovar bancas en el Concejo en marcha (el 11 agosto se desarrollarán las elecciones primarias y muchos de los actuales ediles volverán a ser candidatos), las especulaciones están a la orden del día, con lo cual cada uno atiende su propio juego.

Desde el oficialismo buscaban ayer mostrar avances y apurar la definición de temas que consideran importantes. Pero no hubo caso. La comisión de Planeamiento tenía en agenda tratar el pedido de la firma Transatlántica para ampliar los metros cuadrados de edificación del hotel que se está construyendo sobre unos viejos silos en la zona de Puerto Norte. Pero no hubo quorum para que se celebrara la reunión. Al Salón de los Acuerdos del Palacio Vasallo sólo llegaron dos ediles socialistas y un opositor, Alejandro Roselló, del PRO. Los concejales de la UCR Jorge Boasso; de Rosario Federal, Diego Giuliano; del PPS, María Fernanda Gigliani y del PRO, Laura Weskamp, no se dejaron ver por el lugar y, así, la reunión no se hizo.

La idea oficial era acelerar el tratamiento de un proyecto enviado hace siete meses al Palacio Vasallo, en el que se solicitó a ese cuerpo permiso para ampliar la edificación del hotel de lo que por entonces estaba permitido hasta llevarlo a unos 4.000 metros cuadrados y una altura de 52 metros. Ese pedido nunca avanzó.

El tema trajo cierta polémica luego de que el edil de Proyecto Sur, Alberto Cortés, denunciara el pasado 13 de junio que la empresa está ya construyendo presuntamente más de lo autorizado sin que aún se le haya dado curso a su solicitud.

La historia continuó hace dos semanas, cuando con el fin de responder a la denuncia representantes de Transatlántica e Ingeconser (en cuyo complejo, Ciudad Ribera, se desarrolla el hotel) llevaron al Concejo un permiso de edificación que los autorizó en 2009 a ampliar la superficie a construir otorgado por la Comisión Técnica de Urbanización (CTU), dependiente del Ejecutivo. Según esos papeles, se les permitió llegar a 2.700 metros cuadrados en 42,4 metros de altura, números éstos ya superiores a los límites permitidos.

Desde el Ejecutivo señalaron que esa extensión fue otorgada tras evaluar que la misma no redundaba en un impacto ambiental o patrimonial histórico nocivo para la ciudad. Y entregaron la semana pasada copia de los expedientes de la CTU al Concejo. Esos papeles eran los que se iban a analizar y debatir ayer en comisión.

Carriles

En tanto, para hoy fue invitada al Palacio Vasallo la gerenta del Ente de la Movilidad de Rosario, Mónica Alvarado, con el fin de que explique algunos aspectos del proyecto que propone avanzar con los carriles exclusivos en avenida Alberdi, cuyo expediente ingresó al Concejo en septiembre del año pasado.

En ese encuentro participarán ediles de las tres comisiones por las que debe pasar la iniciativa (Servicios Públicos, Gobierno y Obras Públicas) y la idea oficial es darle despacho esta misma semana.

Las dudas que plantearán hoy los ediles opositores girarán en torno a cómo afectarán a los peatones las paradas de ómnibus, teniendo en cuenta la particularidad de que esta vez el carril exclusivo correrá por el centro de la avenida. Pero las incógnitas más importantes están vinculadas a posibles complicaciones que podrían darse en el tránsito y para quien llegue en su vehículo particular a la hora de estacionar y, sobre todo, al momento de salir tras haber aparcado. La idea es que en la zona los autos se ubiquen a 45 grados y de “trompa” (hoy lo hacen de culata).

Lo cierto es que ayer representantes de los comerciantes de avenida Alberdi salieron a meter presión y señalar que no avalarán la posibilidad de que por esas presuntas complicaciones se retire la posibilidad de estacionar en esa arteria. Oscar Díaz, vecino y referente de ese paseo comercial, señaló en declaraciones radiales que “no hay problemas con que se implementen los carriles siempre que haya un embellecimiento general, que se trabaje un poco más en la avenida que está muy caída. Y sobre todo, que no se toquen los estacionamientos porque eso sería letal para los comercios de Alberdi, porque es un sector que está entre los dos shoppings”.

“Si nos sacan el estacionamiento la gente no va a venir. Aún con el aparcamiento a 45 grados va a haber problemas también porque se generan cuellos de botella en el tránsito. Pero bueno, igual nosotros apoyamos siempre que se tengan en cuenta estos dos puntos”, insistió sobre la posición.  La iniciativa propone sendas únicas para taxis, remises y colectivos urbanos en Alberdi entre calle Nansen y el patio Parada (playa de maniobras ferroviarias ubicada a la altura del Cruce Alberdi).

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