Edición Impresa

Drama patriótico en escena

La actriz Ingrid Pelicori protagoniza “1810”, de Martín Coronado, bajo la dirección de Eva Halac, una obra estrenada hace un siglo en el marco de los festejos del Centenario de la Revolución de Mayo.

Ingrid Pelicori es la protagonista de 1810, un drama patriótico de Martín Coronado que se estrenó un siglo atrás y que el fin de semana volvió a escena en el porteño Teatro de la Ribera con dirección de Eva Halac, en el marco del Bicentenario de la Patria.

Estrenada hace un siglo por la compañía Podestá-Vittone, durante los festejos del Centenario, la pieza no se centra en los clásicos héroes sino que narra lo que sucede en una familia con raíces hispanas en tiempos de la Revolución de Mayo. Dos comerciantes españoles (Pelicori y Manuel Vicente) criaron a su hija y sus sobrinos, pero ante la avalancha de la historia, la familia se fractura: ellos siguen soñando con la Corona, mientras los jóvenes se definen por el lado criollo.

“Es una oportunidad para reivindicar al autor Martín Coronado”, dijo Pelicori en diálogo con  la agencia Télam, quien agregó: “Hay un pueblo que se llama así y muy poca gente sabe quién fue Martín Coronado, un poeta, además de dramaturgo, que fundó la entidad previa a lo que hoy es Argentores”.

Según la directora Eva Halac, “Coronado era un defensor de los derechos del autor nacional, con una trayectoria larga que en su momento lo hizo muy popular, porque ¿qué otro autor tiene un pueblo y la sala más importante del  Complejo Teatral de Buenos Aires? (por la sala que lleva su nombre en el Teatro San Martín)”, señaló con humor.

“Yo propuse la obra porque me gustó mucho desde antes, cuando la encontré revisando un material”, prosiguió Halac. “Hace mucho que vengo trabajando sobre la Revolución de Mayo, e incluso la época anterior, y en general, las obras que tocan el tema fueron escritas para la ocasión, con próceres e intención didáctica”, completó.

La directora señaló que el único personaje conocido de la obra es Domingo French, “pero esto es una obra de teatro, me maravilló porque Coronado es un dramaturgo, contrariamente de otros que se han puesto a escribir sólo desde la buena voluntad y el conocimiento histórico”, completó.

Halac señaló que ésta, “es una de las últimas obras del dramaturgo con sabor local, porque cuando descubre a los Podestá, que la estrenaron, tiene el placer, como muchos autores de la época, de que sus obras fueran representadas por actores no españoles”.

A fines del siglo XIX, cuando Coronado escribía, “necesariamente había que escribir obras que pudieran ser dichas en el castellano español, pero él tenía muchas obras locales que sucedían en el campo, en la época de Rosas, o en el norte argentino en la época de la Conquista”, expresó Halac.

“Creo que los Podestá le dieron un empujón y eso lo hizo un autor popular. Era de esos autores que al final de cada representación, el público se levantaba pidiendo por su presencia;  a él le pasó”, apuntó.

Lo que admira Pelicori es el tratamiento del lenguaje: “Está escrita en verso, no un verso pesado sino todo lo contrario. Tiene su musicalidad y el tratamiento del lenguaje es hermoso porque da el aire de la época”.

“La particularidad es que está contada desde una familia española –señaló la actriz–, una familia común que tiene una mercería a donde va (Domingo) French a buscar las cintitas, donde hay un amor cruzado entre nuestra hija y el primo, el revolucionario, en una especie de Romeo y Julieta”.

La actriz agregó: “Lo interesante es que la pieza se ve desde los sentimientos humanos encontrados que ocurren tangencialmente a algo tan importante como la Independencia. Pero está focalizado allí, como acompañamiento del proceso histórico”.

Halac comentó que al elegir a Pelicori para el papel de madre tuvo en cuenta “que todos los personajes tuvieran esa frescura que también tiene el autor, porque la madre propuesta es una mujer con integridad y con un humor muy particular”.

“Coronado quiso mostrar una española , que es una de las pocas cosas que han variado desde el libreto original, porque creo que en aquel tiempo era muy común oír hablar el español y había muchos actores que lo podían hacer, por lo que no resultaba inverosímil”, concluyó.

1810, cuyo elenco completan Monina Bonelli, Paloma Contreras Manso, Darío Guersenzvaig, Marcos Martínez, Pepe Monje, Manuel Novoa, Lucila Rada y Claudio Rodrigo,  se representa en el Teatro de la Ribera (Pedro de Mendoza 1821), los sábados a las 18 y los domingos a las 12.30.

Comentarios