Hubo dos explosiones que dejaron cuatro heridos al final de la tarde de este lunes.
cañería sin tapón
El primero de los hechos ocurrió en Camilo Aldao al 300 bis: en principio, un escape de gas en el interior de una vivienda desencadenó una explosión a consecuencia de la cual los dos integrantes del matrimonio que alquila desde hace poco la casa resultaron, el hombre, de 58 años, con quemaduras leves y la mujer, de 31, con algunos golpes al ser alcanzada por la onda expansiva. Debieron ser internadas en el Sanatorio Británico, aunque sólo por precaución. Aparentemente, la pérdida fue en un punto de la cañería de gas natural, una derivación sin el tapón de cierre que ocasionó la pérdida y posterior explosión tras abrir la llave de paso. Al lugar concurrieron bomberos y personal de Litoral Gas para cortar el suministro. El incidente, con ser menor, creó incertidumbre entre los vecinos de una ciudad sensibilizada tras la tragedia de Salta 2141.
tapa eléctrica abierta
El segundo hecho se produjo en inmediaciones de Mitre y 9 de Julio. Allí, fue otro de los servicios el que estuvo en el origen del siniestro: una mujer mayor, que reside en una casa de 9 de Julio 1187 intentó acomodar las cajas de tapones y medidor de la EPE porque –relataron vecinos– hacía tres días que tenía cortado el suministro y una de esas cubiertas había quedado abierta tras el paso de empleados de la empresa de energía que realizaron tareas en el medidor. Durante esa maniobra de la mujer, identificada como María Elisa B., de 77 años, una de las tapas metálicas presuntamente provocó un cortocircuito al tocar partes del interior bajo tensión. La explosión resultante dejó heridas a la señora y a un hombre, Miguel F., de 60 años, que transitaba por la vereda y se había ofrecido a ayudarla. Al sitio acudió personal del Sies, que trasladó al hombre, con quemaduras de tipo A y B en mano derecha, al Sanatorio Británico. María sufrió quemaduras tipo A en su mano derecha y rostro, quedando en observaciones en el Sanatorio Ipam.
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