A dos semanas de su operación por un hematoma intracraneal, la presidenta Cristina Kirchner desarrolla “un posoperatorio normal” con “control diario neurológico, neuroquirúrgico y clínico-cardiológico”, se informó mediante un parte médico de la Fundación Favaloro, y se mantendría en reposo al menos durante 15 días más.
Las precisiones se dieron a conocer tras una visita de la jefa de Estado al Hospital de la Fundación Favaloro, donde se le realizó una tomografía y otros chequeos con el objetivo de controlar su evolución tras la operación.
“La Presidenta está muy bien, ya se realizó los estudios”, indicó a las 21.45 el secretario de Comunicación Pública, Alfredo Scoccimarro, en las puertas de la Fundación, y poco después se difundió un comunicado oficial.
El parte médico señaló que Cristina “continuará con reposo hasta que se cumplan los 30 días de la cirugía realizando oportunamente nueva evaluación” y precisó que puede efectuar “caminatas, pero no ejercicios que requieran un importante esfuerzo físico y deberá evitar las exposiciones al estrés”.
Ubicada en el asiento trasero de un auto gris de origen alemán, la Presidenta arribó al nosocomio de la calle Belgrano, en el barrio porteño de Balvanera, cerca de las 21 para someterse a una neuroimagen de control, un estudio programado que había sido anunciado en el último parte médico difundido hace 10 días, en la misma jornada en que la mandataria había recibido el alta médica.
“La señora Presidenta de la Nación, doctora Cristina Fernández de Kirchner ha continuado el posoperatorio normal con control diario neurológico por el doctor Facundo Manes, neuroquirúrgico por el doctor Cristian Fuster, y clínico cardiológico por parte de los doctores Francisco Klein y Ramiro Sánchez con la supervisión de los doctores Luis Buonomo y Marcelo Ballesteros de la Unidad Medica Presidencial”, indicó el nuevo parte.
El informe ratificó que días atrás se le retiraron los puntos de la sutura en la residencia de Olivos y que este miércoles la Presidenta concurrió al hospital universitario de la Fundación Favaloro para efectuar “una tomografía computada de cerebro” como parte del control que “puso en evidencia una evolución normal para el tiempo transcurrido desde la cirugía”.
“A partir del 5 de octubre pasado se le realizaron a la Sra. Presidenta estudios cardiovasculares con motivo de sus episodios previos de hipotensión arterial y por un trastorno de la conducción cardíaca con bloqueo de rama izquierda”, añadió.
Y precisó que “en la actualidad no presenta síntomas cardiovasculares” y que “se excluyeron riesgos por medio de un estudio holter de 24 horas en el cual no se observó arritmia significativa y se detectó en forma intermitente un bloqueo de la rama de conducción izquierda”.
“Los resultados del ecocardiograma y eco Doppler de las arterias carótidas no presentaron desvíos significativos con respecto a lo habitual para la edad y genero”, apuntó el parte.
A su vez, se indicó que “por medio de estudios especiales, se confirmó la presencia de una disfunción autonómica vagotónica de la presión arterial, que representa un estado funcional con respuesta aumentada”.
“Como parte de la evaluación preoperatoria y dado que no fue posible realizar una prueba de esfuerzo el día 7 de octubre se le practicó un cateterismo cardíaco a través de una arteria de la muñeca en el cual se confirmó que tiene arterias coronarias angiográficamente normales”, agregó.
Y adelantó que “habiéndose dado lógica prioridad a la neurocirugía una vez completa la recuperación postquirúrgica se programarán estudios adicionales cardiovasculares que en primera instancia consistirán en una prueba de movimiento oscilatorio corporal y un holter prolongado”.
Para cumplir con el estricto reposo de 30 días aconsejado por sus médicos, después de la intervención del 8 de octubre pasado, la Presidenta no podrá votar el próximo domingo en Santa Cruz ni tampoco visitar el mausoleo de Néstor Kirchner, al cumplirse el tercer aniversario de su fallecimiento.
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