En el marco de los festejos por el 195º aniversario de la independencia argentina, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner se dirigió a los argentinos desde Tucumán. Allí, la primera mandataria encabezó el acto oficial, con gran cantidad de asistentes.
“Tucumán me recibe en un hermoso día para recordar a nuestros próceres, a aquellos hombres que en medio de las adversidades se animaron a declarar la independencia en nuestro país. Creo que deberíamos rescatar de ellos un rasgo distintivo, de los hombres y mujeres de los pueblos originarios, de compatriotas de diversas condiciones sociales: que combatieron a sangre y fuego para lograr la liberación de la patria, que estuvieron unidos por la convicción de luchar por la independencia”, expresó Cristina en su discurso.
La presidenta destacó además, como característica fundamental del pueblo “la voluntad de cambio”. Y recordó su primer discurso como presidenta en ese mismo lugar, cuando dijo que los argentinos teníamos que ir por “una segunda independencia económica, que permita tener autodeterminación y que las decisiones se tomen por las personas que han sido elegidas por el pueblo, en los ámbitos que corresponden”.
En este sentido, recordó a su marido, Néstor Kirchner, que “se animó a luchar contra el establishment que no permitía que Argentina creciera y se desarrollara” y criticó la ambición desmedida de “las corporaciones” que “pretenden comerse toda la torta, cuando lo único que hacen es indigestarse”.
Cristina advirtió que en la lucha por la justicia “jamás vamos a entregar nuestra historia, nuestras ideas y convicciones, no vinimos a eso a la política” y se volvió a referir a la inclusión de los jóvenes en la política, “no para luchar contra una dictadura o por disconformidad, sino para apoyar las políticas de este gobierno”.
“Por primera vez, este 14 de agosto en un ejercicio de democracia interna, de participación popular cada uno podrá elegir a sus candidatos en el partido político que más les guste, no importa para quien sea el voto, todos podrán dar su presencia para que no decidan las burocracias políticas sino los argentinos”, concluyó la presidenta.
Y cerró el acto con un mensaje claro: “Es necesario mantenernos unidos porque allí está la fortaleza”.
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