Esta semana se conoció un nuevo procesamiento en la causa que investiga el crimen de Diego “Tarta” Demarre, ocurrido en mayo de 2013. La víctima –dueño del boliche villagalvense en cuyo exterior fue asesinado un día antes Claudio “Pájaro” Cantero– fue ejecutado cuando llegaba desde Tribunales a su vivienda. Por el hecho hubo tres procesados, entre ellos el hermano del Pájaro, sindicado como el autor de los disparos. Ahora, Andrés “Gitano” Fernández, de 39 años, fue encausado como partícipe primario del hecho. De la instrucción derivó que hay elementos para señalarlo como el conductor del auto que se utilizó para ultimar a Demarre. Asimismo, el juez Luis María Caterina dictó la prisión preventiva del acusado.
Demarre era el dueño del boliche Infinity Night, ubicado en Villa Gobernador Gálvez, en el límite con Rosario. La madrugada del 26 de mayo de 2013, llegó hasta sus puertas el Pájaro Cantero, jefe de la banda de los Monos, con tres acompañantes. A unos 50 metros de la entrada y frente a un portón fue baleado mientras orinaba: murió dos horas después en el Heca. –Por este caso, hay tres jóvenes procesados–.
Al día siguiente Demarre –que había cedido de palabra el manejo del boliche pero esa noche se encontraba en el lugar– se dirigió a Tribunales con la intención de desvincularse del hecho. Allí se encontró con un tal Piky, quien regenteaba el boliche, algunos de los empleados y con Jesús Gorosito, quien estaba con Cantero al momento de su muerte. Permaneció algunas horas frente al Juzgado de Instrucción 11” con su pareja y se retiró en su vehículo. Según la investigación, sus movimientos fueron monitoreados en el interior del edificio y en el trayecto a su casa. Cuando Demarre giró en “u” en la intersección de Seguí y Maipú, un Volkswagen Bora blanco se le puso a la par, prácticamente pegado, y Demarre fue acribillado. La secuencia quedó grabada por la cámara de seguridad de la casa de la víctima, quien recibió 6 plomos en su cuerpo. Detrás del Bora giró un automóvil Audi Q5 blanco que se detuvo a unos metros, observó la escena y continuó la marcha, aunque luego se determinó que no estaba vinculado con el ataque.
La pareja de la víctima, Betiana Quintana, confirmó la presencia de su marido la noche previa en el boliche y sostuvo que Demarre no tenía problemas con nadie, pero temía que los familiares de Cantero pensaran que tenía algo que ver con su asesinato, lo que motivó su ida a Tribunales. Respecto del crimen del Tarta, la mujer sostuvo que sólo vio un auto blanco y entendió que el atacante metió la mano por la ventanilla al disparar.
Por el hecho, Ariel Máximo Cantero, alias Guille y hermano del Pájaro, fue procesado por la jueza Alejandra Rodenas como el autor de los disparos fatales, mientras que Jorge “Ema” Chamorro y Leandro “Gordo” Vilches corrieron la misma suerte como partícipes primarios. Estos últimos fueron señalados como las personas que siguieron a la víctima durante su estadía en Tribunales y avisaron de su salida. Ahora fue el turno del Gitano Andrés, sindicado conductor del auto en que iba el tirador.
El Gitano
Edgardo Andrés Fernández fue procesado esta semana por el juez Luis María Caterina como partícipe primario del delito de homicidio calificado por el concurso premeditado de dos o más personas agravado por el uso de arma de fuego. El magistrado entendió probado que Fernández es el Gitano Andrés, quien está vinculado al clan Cantero y que utilizaba el auto Bora blanco que fue tomado por un domo ubicado en la esquina del Heca entre las 5 y las 8 del 26 de mayo de 2013, cuando llegó agonizante al hospital Claudio Cantero. El magistrado sostuvo que las características de este vehículo son similares al utilizado en el crimen, a lo que sumó la coincidencia en la terminación de la patente. Además, el vehículo fue repintado de negro y vendido fuera de la provincia, lo que acrecienta su teoría.
A su vez, Caterina tuvo en cuenta las escuchas de la llamada megacausa Monos –expediente por asociación ilícita que tiene a 38 procesados– donde surgen contactos entre el Gitano y el Gordo Vilches; incluso hay información sobre otro auto, propiedad del Gitano, que fue chocado por Vilches el 10 de mayo del mismo año. Dato que el magistrado consideró trascendental al evaluar una escucha entre Vilches y Chamorro, donde el primero da detalles de la muerte de Demarre y le dice: “Quedamos re-bien y encima piloteaba el… al que el chocaron el auto ustedes ¿viste?”, refiere el fallo. El juez sostiene la existencia de escuchas que dan cuenta de la participación de Vilches y Chamorro en el hecho, de su actuación al servicio de Guille Cantero, de la premeditación del hecho y la sindicación de este último como el autor material y del ahora procesado Gitano como el conductor por parte de Chamorro.
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