Ciudad

Corralitos: Assa dice que se redujeron a la mitad

De los 300 que había a principios de 2010 ahora quedan unos 160 en los distintos barrios de la ciudad.

Pese a las reiteradas quejas de automovilistas, motociclistas y vecinos por la presencia de corralitos de Aguas Santafesinas Sociedad Anónima (Assa) dispersos a lo largo y ancho de la ciudad –al punto que el miércoles pasado un grupo de ciudadanos realizó un irónico festejo de cumpleaños a un pozo que la empresa abrió hace un año en Maipú y San Juan–, desde la compañía aseguraron ayer que en poco menos de doce meses la cantidad de vallados en la vía pública se redujo a la mitad. Además, desde la firma de capitales estatales reconocieron que existen problemas en el suministro de agua “especialmente en los barrios periféricos” y adelantaron que para solucionar los distintos inconvenientes se lanzará en el próximo mes de febrero la licitación del primer módulo de la nueva planta potabilizadora en Granadero Baigorria, la que se espera “solucione de manera definitiva” los problemas de carencia del vital elemento “no sólo en Rosario sino en poblaciones vecinas”.

Con respecto a los corralitos, el titular de Assa, Alberto Daniele, recordó que 2009 fue un año crítico al respecto. “Se nos juntaron muchas demandas, no sólo de separación sino de nuevas conexiones. Cada conexión nueva, tanto de agua como de cloaca, implica un nuevo corralito. Ese atraso en la atención de los reclamos por las nuevas conexiones se nos juntó con los atrasos por roturas. Hemos hecho una disminución del 50 por ciento en estas intervenciones pero obviamente nuestro objetivo es reducirlo aún más. Quedan unos 160 corralitos cuando hace un tiempo estábamos en más de 300”, remarcó.

El funcionario comentó más adelante que desde la empresa ya se venía previniendo que el verano de 2011 iba a ser “difícil”. “Esto se debe a partir de los pronósticos climáticos y porque sabemos que hay una demanda insatisfecha en la periferia de la ciudad y ése es el motivo por el cual estamos trabajando la nueva planta y acueducto del Gran Rosario. Respecto a los barrios estamos haciendo trabajos puntuales en cada uno de los sectores que más críticamente están sufriendo el problema del agua, con distinto éxito conforme a las variaciones de la temperatura. En función de lo que se viene, puedo decir que en febrero estamos lanzando la licitación del primer módulo de la nueva planta potabilizadora en Granadero Baigorria, que será la solución definitiva para los problemas de carencia de agua no sólo en Rosario sino en todas las poblaciones vecinas”, destacó.

En respuesta a las quejas expresadas públicamente por el intendente Miguel Lifschitz tras los anegamientos en distintas partes de la ciudad –especialmente en la zona de la Terminal de Ómnibus– luego de las últimas lluvias, pidiendo que se culmine con las obras del conducto Vera Mújica, Daniele explicó que las obras estarán finalizadas el año que viene. “Ya habíamos anunciado que en el transcurso de 2011 íbamos a encarar la etapa final del conducto Vera Mujica. Hoy el conducto fue ejecutado desde avenida Pellegrini, por calle Vera Mujica, hasta Córdoba. Está trabajando como un reservorio, es decir como un conducto que acumula agua de lluvia de ese sector y a través de un sistema de bombeo lo deriva a las redes pluviocloacales de la ciudad, una vez pasados los picos de tormenta. El objetivo es que esa primera y segunda tapa sea complementada con la etapa final que es la continuación desde calle Córdoba hacia el norte de manera tal de transformarlo en un conducto que descargue en el río Paraná”, explicó.

“Ésta es una obra importante con una inversión de unos 12 millones de pesos. Nosotros ya tenemos imputación presupuestaria para el año 2011 y será terminada en el 2012. Nuestro plan es estar licitando por abril, con lo cual la obra tendría un principio de ejecución a fines de mayo y continuaría a través del programa bianual en 2011 y 2012”, continuó.

“La obra es importante porque forma parte del saneamiento de todo lo que nosotros denominamos radio antiguo de la ciudad de Rosario que es pluviocloacal. La diferencia con los barrios es que allí los sistemas son separativos, es decir las cloacas van por un lado y los sistemas pluviales por otro. En el caso del radio antiguo, que es el viejo sistema heredado de los ingleses cuando ejecutaron las obras de infraestructura de la ciudad, el sistema es unitario: es decir, los mismos conductos transportan los efluentes pluviales y los cloacales. Este sistema, con el paso del tiempo y la urbanización creciente de la ciudad, fue demostrando sus limitaciones. Los que eran en un momento terrenos absorbentes, centros de manzana, se fueron impermeabilizando en forma progresiva de manera tal que hoy la ciudad en su casco antiguo no tiene capacidad de absorción, por lo cual toda el agua de lluvia que cae sobre la ciudad escurre y los viejos conductos resultan insuficientes para caudales tan importantes”, añadió.

Además, el presidente de Assa comentó que entre los distintos objetivos está la construcción de nuevos aliviadores. “Nosotros actualmente estamos en la planificación de esas inversiones pero es un plan de largo aliento que está pendiente de ejecución. La obra de Vera Mujica tiene mucha importancia porque absorbe los caudales que vienen desde el oeste. Los anegamientos de sectores próximos a bulevar Avellaneda y a la Terminal de Ómnibus se van a terminar cuando ese caudal sea incorporado al Vera Mujica, que saneará todo ese sector y simultáneamente aliviará todo el trabajo de los colectores pluviocloacales que se encuentran de avenida Francia hacia el este, es decir hacia el río Paraná”, subrayó.

Por último y sobre cómo marcha la campaña para ahorrar agua que tiene a los porteros de los edificios como protagonistas con el uso de baldes o pistolas en lugar de las mangueras a la hora de lavar las veredas de los edificios, el titular de Aguas dijo que “se está avanzando”. “Uno a veces es ansioso en ese sentido y quisiera que las malas prácticas fueran desterradas por decreto (se ríe). Las cosas pasan por un tema cultural y los seres humanos muchas veces somos lentos de reacción. No obstante eso, se observa un uso progresivo del balde y de los sistemas de corte cada vez más en la zona del macrocentro. Será cuestión de seguir y no aflojar”, concluyó.

Comentarios