Policiales

Crimen en Nuevo Alberdi

Confirmaron perpetua para autor del femicidio de Milagros Sánchez

El sobrino de un vecino, con antecedentes por abuso sexual, fue el principal sospechoso. Lo enviaron a juicio y en mayo pasado lo condenaron por rapto y homicidio criminis causa a la pena máxima. Ahora la Cámara Penal confirmó la decisión que dejó al reincidente tras las rejas.


Milagros tenía 14 años, vivía en la periferia, al norte de la ciudad. Se crió con sus abuelos hasta que su mamá se la llevó a vivir con ella a una cuadra de distancia. El mediodía del 15 de febrero de 2015 caminó hasta la casa de sus abuelos a buscar un control remoto, pero no volvió. Cinco días después la encontraron en un zanjón de Nuevo Alberdi, envuelta en un nylon, atada con alambre, a metros del lugar donde pasó su infancia. El sobrino de un vecino, con antecedentes por abuso sexual, fue el principal sospechoso. Lo enviaron a juicio y en mayo pasado lo condenaron por rapto y homicidio criminis causa a prisión perpetua. Ahora la Cámara Penal confirmó la decisión que dejó al reincidente tras las rejas.

Tres meses antes del crimen, Juan José Pérez llegó al barrio. Su tío tenía un horno de ladrillos y le dio una pieza al frente del terreno donde vivía con su mujer que, dos por tres, se iba. A Milagros Sánchez la criaron sus abuelos y un mes antes de su asesinato se fue a vivir con su mamá. Ese mediodía la mujer la mandó hasta lo de su abuela a buscar un control remoto para encender el DTV. La nena caminó por Floduardo Grandoli hasta el final de la calle, a metros del canal Ibarlucea. La niña se fue con el aparato, pero nunca llego a destino. Su tío la vio parada en la pieza de  Pérez, a dos casas de su abuela. Luego escuchó gritos de una mujer desde adentro.

Al viernes siguiente la encontraron en un zanjón a metros de la vivienda de sus abuelos, un nylon que sobresalía sobre los yuyos llamó la antelación de dos muchachos que estaban sentados sobre el guardaraid mientras la policía hacia un rastrillaje. Era el cuerpo de Milagros. Su abuelo estaba ahí “le vi la cara nomás a Milagros, me descompuse, no aguanté ver el cuerpo cómo estaba”, relató. Las juezas Hebe Marcogliese, Alejandra Rodenas y Raquel Cosgaya lo condenaron a prisión perpetua por rapto y homicidio criminis causa.

Su familia presenció todo el juicio y lloró desconsolada en el pasillo, tras conocer la condena. Ahora los vocales Carlos Carbone, Guillermo Llaudet y Georgina Depetris confirmaron la decisión por mayoría. Carbone mantuvo la calificación original pero sus colegas sostuvieron que se trató de una tentativa de abuso sexual y homicidio criminis causa.

Testigos declararon que vieron a la chica en la puerta de la casilla de Pérez, también escucharon golpes, gritos y una discusión en el interior de la pieza. La médica forense determinó que Pérez tenía lesiones en el cuerpo, dedo, antebrazos, hombro, omóplato, cuyo origen es coincidente con la franja horaria de la data de muerte de la chica.

En la autopsia se omitió la causa del deceso por el estado de descomposición del cuerpo pero se hallaron ciertas huellas digitales que demostraron el uso de violencia, lo que probabilizó maniobras de estrangulamiento que provocaron asfixia, dice el fallo. Para dos de los vocales no hubo rapto porque el ingreso a la casilla fue consentido, según refirieron y en algún momento mutó a una violencia extrema y Pérez terminó matando a la víctima en procura de impunidad.

 

Voto minoritario

 

Mientras que Carbone explicó que el condenado es doce años mayor que la víctima. El consentimiento sólo lo entiende en el acercamiento de la chica a la pieza y aunque haya ingresado engañada no puede pensarse que conociera la finalidad de Pérez. A lo que sumó la inmadurez e inexperiencia sexual de la chica de las cuales quiso aprovecharse. Y sostuvo los delitos de rapto y homicidio criminis causa.

A pesar de la diferencia en la calificación legal los vocales confirmaron la condena de prisión perpetua y la reincidencia de Pérez que ya contaba con una sentencia previa por abuso sexual y se encontraba en libertad condicional cuando cometió el crimen de Milagros.