Ciudad

Tribunales

Condena judicial a Falabella

Deberá pagar 50 mil pesos a una mujer incluida por error como deudora en la base de datos del Banco Central. Otra persona usó su tarjeta y se culpa a la firma de no tomar los recaudos necesarios para detectar una identidad falsa.


La Justicia condenó a Falabella a pagarle una cifra cercana a los 50 mil pesos a una mujer que por error fue incluida como deudora en la base de datos del Banco Central de la República Argentina. Frente a esto, la Organización Veraz la había calificado como “morosa en calidad de irrecuperable”. La cuestión es que, usando una identificación falsa, otra persona había sacado la tarjeta de crédito CMR, que otorga la empresa de capitales internacionales, y había firmado en nombre de la damnificada un total de trece cupones de compras con una rúbrica que no se correspondía con las características caligráficas de la supuesta deudora.

Las integrantes del Tribunal de Responsabilidad Extracontractual Nº1 –Susana Igarzábal, Paula Sansó y Delia Giles– sostuvieron en el fallo que “el error tuvo su origen en el accionar de la tarjeta de crédito, que no tomó los recaudos necesarios a fin de corroborar que quien firmó el contrato no era la persona que se mencionaba en el mismo”.

La mujer figuró durante veinte meses como deudora del sistema financiero. Frente a esto, las magistradas sostuvieron que “aparecer erróneamente en un registro de datos públicos en calidad de moroso constituye un daño moral”.

“Se evidencia un obrar antijurídico y culpable de la demandada por cuanto la atribución de morosa a la mujer no era correcta ni reflejaba la real situación”, se destaca más adelante en la sentencia que se dio a conocer en los Tribunales locales.

“Aparecer en una base de datos de deudores morosos sin haber dado motivo alguno constituye una lesión al equilibrio emocional de toda persona”, agregaron las juezas.

La suma original que la Justicia ordenó pagar a Falabella era 15 mil pesos, que con intereses y costas se terminó convirtiendo en los 50 mil pesos finales.

Además, se ordenó a la Organización Veraz retirar de su base de datos la inexistente deuda.

El sistema

La Organización Veraz es un sistema que agrupa datos sobre la solvencia económica, los deudores y morosos, los pedidos de préstamos de dinero y demás cuestiones, entre otras operaciones económicas.

En general cuando se va a pedir un préstamo o realizar una transacción económica cualquiera, la compañía que lo otorga procura previamente obtener un registro Veraz de la persona solicitante, que es básicamente un legajo que contiene información personalizada de carácter comercial y financiera, datos crediticios y medios de pago referidos al cumplimiento de obligaciones y pagos de deuda por parte del comprador o tomador de crédito.

El Veraz nutre su base de datos con información muy diversa, cuyas principales fuentes son el Banco Central de la República Argentina, resoluciones judiciales y de clientes del servicio como bancos, empresas y otros.

Un tema delicado

El abogado especializado en derecho de daños, Sebastián Navas, explicó a este diario que la cuestión tiene que ver con “el derecho a la información y a la protección de los datos personales y en este caso confluyen ambas temáticas”.

“La protección de los datos personales tiene que ver con no ver afectado el buen nombre y honor de las personas”, indicó.

Sobre la Organización Veraz, el profesional contó que se trata de un ente privado que se dedica a informar y entregar datos del sistema financiero como deudas en tarjetas de crédito, cheques, créditos en general, deudas en comercios y otras instituciones, a entidades también privadas que suelen solicitarlos.

“Tiene un nivel de calificación del 1 al 5, dependiendo del nivel de deuda. Ésos son datos que se les entregan a las empresas para evaluar la situación de un probable nuevo cliente”, continuó.

“Se da como un entrecruzamiento de datos. Por ejemplo, si yo tengo una deuda tras varios vencimientos con el Banco Francés lo que hace la entidad financiera es informar al Banco Central de la República Argentina, que regula a todos los bancos tanto estatales como privados del país, y al Veraz”, remarcó.

“En este caso hubo una negligencia por parte de la empresa por no haber tomado los recaudos necesarios para darse cuenta de que se trataba de una persona usando la identidad de otra. Las quejas y denuncias contra el Veraz son muy comunes. Además ellos mantienen la información de los deudores por dos años, no borran los datos por ese tiempo, y los tendrían que borrar de manera automática una vez que se cancelaron las deudas”, concluyó el profesional.

Otros fallos similares contra “pesos pesados”

En 2011 se conocieron dos sentencias que también tuvieron a grandes firmas como protagonistas por brindar datos erróneos sobre la situación financiera de distintas personas. Así fue que primero la Justicia ordenó al Citibank pagar a un hombre una suma cercana a los 50 mil pesos tras haber informado al Banco Central que era un deudor con alto riesgo de insolvencia y difícil recuperación, lo que resultó falso. Esto impidió que el hombre obtuviera créditos en diferentes comercios y le generó un trastorno de ansiedad que lo llevó a someterse a un tratamiento.

La entidad financiera fue condenada a indemnizar a la víctima por el daño moral y material ocasionado debido a que no extremó los recaudos, ni corroboró los datos al calificarla como deudora irrecuperable.

Otro caso que se conoció meses más tarde fue una condena a Coto Centro a pagar 15 mil pesos más costas por daño moral a una persona que fue incluida en la Organización Veraz en el marco de una maniobra donde terceros no identificados usaron su identidad para acceder a una tarjeta de crédito otorgada por el supermercado.

La situación le trajo al demandante una serie de perjuicios como haber visto comprometido “su buen nombre y honor”.

Comentarios