Un chico de siete años que iba junto a su padre a bordo de un camión murió ayer tras un accidente en la zona de avenida Circunvalación y avenida del Rosario, en la zona sur de la ciudad, cuando el conductor perdió el control luego de chocar dos veces contra el muro de contención de cemento que separa ambas manos de la autovía.
El niño salió despedido por la ventana y falleció a causa de un fuerte traumatismo de cráneo y su padre, de 33 años, fue internado en el hospital Gamen de Villa Gobernador Gálvez donde se encontraba fuera de peligro pero en un profundo estado de shock.
El hecho ocurrió pasadas las 10 de la mañana, momento en que caía en el lugar una fuerte lluvia que pudo haber provocado el siniestro por encontrarse la calzada mojada.
Una vez informado del hecho, personal de la Policía de Investigaciones (PDI) y científica, gendarmes y funcionarios del Ministerio Público de la Acusación se acercaron hasta el lugar para realizar las pericias correspondientes e intentar determinar lo ocurrido.
El tránsito quedó reducido a dos carriles y solamente se pudo circular por uno de ellos durante unas horas con “marcha lenta” a lo largo de unos 500 metros.
El chico también fue llevado hasta el Gamen pero los médicos no pudieron hacer nada para salvarle la vida.
La fiscal Mariana Prunotto tomó declaraciones a algunos testigos con el objetivo de recopilar datos para la investigación.
En diálogo con este diario, Prunotto contó: “Lo que hicimos fue acercarnos hasta el lugar ni bien nos informaron de lo sucedido con la Policía y luego estuvieron trabajando los peritos para recolectar pruebas y poder determinar qué fue lo que ocurrió”.
“El padre está internado en el Gamen en estado de shock y la familia está destruida, es una situación muy difícil. Realmente no entendemos qué fue lo que pasó porque el camión chocó dos veces contra la pared de contención de cemento del medio de la avenida y allí es donde sale disparado el chico fuera del habitáculo del camión y termina falleciendo por traumatismo de cráneo. El vehículo, por su parte, acaba yéndose a la zanja”, explicó.
“Son una de una familia de Rosario y el padre tiene 33 años, sigue internado y no está en riesgo de vida. El hecho ocurrió pasadas las 10 cuando se desató en esa zona una lluvia muy fuerte y según llegó a contar el padre en el momento del accidente no se veía nada. Lo paradójico es que, cuando llegamos, al poco rato, ya era un día de pleno sol, o sea que la tragedia ocurrió en los pocos minutos que hubo de lluvia intensa”, concluyó.
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