El regreso del pasado como metáfora de la impunidad. La Iglesia católica chilena entregó ayer al presidente Sebastián Piñera su propuesta de indultos con motivo del bicentenario de la independencia que se cumple en septiembre próximo, que incluye a ex militares condenados por delitos de lesa humanidad, lo cual anticipa el rechazo de la oposición y de organismos de derechos humanos.
En efecto, el presidente de la Conferencia Episcopal, Alejandro Goic, y el cardenal Francisco Errázuriz presentaron ayer a Piñera en el Palacio de La Moneda un documento de cinco páginas en el que la Iglesia católica pidió revisar “caso a caso” el posible indulto a quienes tienen condenas firmes. En el escrito del Episcopado, que lleva el pomposo título “Una mesa para todos en el Bicentenario”, la Iglesia considera: “No sería completa «la mesa para todos» si no considerásemos en esta petición a quienes cumplen penas por delitos contra los derechos humanos cometidos durante el régimen militar”.
Y agregan: “Es un tema que debemos poner sobre la mesa de todos para conversarlo con la seriedad que corresponde, especialmente en el Parlamento de la República. No todos tuvieron igual responsabilidad en los crímenes que se cometieron”.
Siguiendo esta lógica, los prelados consideran que se debe distinguir “el grado de responsabilidad que le cupo a cada uno, el grado de libertad con que actuó, los gestos de humanidad que tuvo y el arrepentimiento que ha manifestado por sus delitos”. En este marco, es preciso indicar que, según informes oficiales, durante la última dictadura (1973/90) en Chile unas 3.000 personas fueron asesinadas y existen 50.000 denuncias de torturas.
Por su parte, la ministra secretaria General de Gobierno Ena von Baer llamó a “esperar con calma la reflexión y la decisión del presidente y a no adelantar juicios respecto a ella”.
En tanto, desde la opositora Concertación, en particular en la figura del ex presidente democristiano Eduardo Frei, se rechazó la alternativa de un indulto para los ex militares condenados por sus delitos durante la dictadura pinochetista.
De similar manera se pronunciaron los miembros de los organismos defensores de los derechos humanos, tal como lo hizo ayer la presidenta de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos, Lorena Pizarro, quien acusó a la Iglesia de estar “dando vuelta la espalda a las víctimas”.
Al encabezar una manifestación en la Plaza de la Constitución, Pizarro señaló que la Iglesia “está pensando en los criminales que estuvieron más de 20 años impunes, está desconociendo a todos los sacerdotes que perdieron la vida en la dictadura y a quienes aún esperan saber de sus seres queridos”.
Comentarios