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Pánico en Santiago

Chile: 10 heridos por explosión en el subte

Estalló una bomba artesanal. Fue “atentado terrorista”, dijo el gobierno.


Una explosión se produjo ayer en el sector comercial cercano a la estación de subte Escuela Militar, en el barrio Las Condes, uno de los más coquetos de Santiago, poco después de las 14, cuando estalló un extintor de incendios cargado con pólvora negra que estaba dentro de un cesto de residuos. “Condenamos enérgicamente este atentado terrorista; este hecho gravísimo necesita y requiere que el país actúe con fuerza y que tenga las máximas sanciones posibles”, afirmó el ministro del Interior, Rodrigo Peñalillo. En total, anoche se contabilizaban diez heridos.

Tres mujeres –una de 67 años, otra de 61 y la tercera sin identificar– estaban graves pero sin riesgo de muerte, luego de que dos de ellas fueran reanimadas, informó Max Ekdhal, traumatólogo de guardia de la clínica Las Condes.

En tanto, en el hospital Salvador, un ciudadano venezolano de 35 años –que en un primer momento fue señalado por error como argentino– fue internado con fractura expuesta de una pierna, reportó el jefe de urgencias de ese centro sanitario, Horacio Díaz.

“Vamos a invocar la ley Antiterrorista y vamos a disponer de todos los recursos necesarios para que este hecho tan condenable, lamentable, tenga a los responsables en el lugar que corresponde, que es tras las rejas en la cárcel”, sostuvo Peñalillo.

Además, anunció que la presidenta Michelle Bachelet suspendió las actividades programadas y visitó a los heridos.

El subsecretario del Interior, Mahmud Aleuy, confirmó que la Policía de Investigaciones y Carabineros estaban “trabajando” en la pista de dos jóvenes que, según testigos, dejaron un bolso en el lugar donde se produjo la explosión y se alejaron rápidamente en un automóvil Chevrolet Corsa blanco.

El fiscal Francisco Bravo detalló que el artefacto que detonó estaba compuesto por un extintor, pólvora negra y un temporizador, y fue un dispositivo “muy similar” al que estalló el 13 de julio pasado en un vagón de subte en la estación Los Dominico.

Sospechas sobre grupos juveniles

Hasta anoche, ningún grupo se adjudicó la autoría del ataque. La prensa local reparó en que el estallido se produjo una hora después de que se conociera el fallo de la Corte Suprema que ratificó las condenas a tres miembros del grupo guerrillero Movimiento Juvenil Lautaro declarados culpables del asesinato de un cabo de Carabineros y el asalto a un banco.

Más de un centenar de explosiones de artefactos artesanales han ocurrido en los últimos cinco años en el país –contra cajeros automáticos, bancos, gimnasios, embajadas o restaurantes, entre otros–, pero hasta ahora sólo habían provocado destrozos y algún herido leve.

Inicialmente fueron reivindicados por grupos que se autodenominaban con nombres de antiguos anarquistas. En los últimos meses, volvieron a registrarse este tipo de ataques. Por primera vez, uno de ellos fue instalado en un lugar concurrido.

Un artefacto había estallado el pasado 14 de julio en un vagón del metro cuando ya no había pasajeros, pero el incidente activó las alarmas del gobierno, que reforzó la vigilancia, y designó un fiscal con dedicación exclusiva para investigar los ataques.

La oposición, de la mano del presidente de Renovación Nacional, Cristian Monckeberg, aseguró que esta situación se “podría haber evitado”, y afirmó que “hay un patrón que se está repitiendo”.

Un caos en pleno almuerzo

La explosión se produjo en el sector de locales de comida de la estación Escuela Militar en pleno horario de almuerzo. “Vi gente herida, sangrando, gritando, llorando, tomando fotos”, dijo Silvana, cocinera de un restaurante aledaño al atacado.“Escuché el sonido atronador y sentí el olor a pólvora”, explicó a la AFP Hernán Capdeville, uno de los miles de pasajeros de la estación de metro de la Línea 1.

“Los clientes salieron todos corriendo sin pagar dejando la comida en los platos”, dijo Rosa Valdés, trabajadora de otro restaurante.

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