Un joven de 26 años reconoció mediante un juicio abreviado haber integrado la banda comandada por Alexis Caminos en barrio Municipal y acordó una pena de 9 años y 6 meses por los delitos amenazas coactivas, robo calificado, encubrimiento, portación de arma de fuego, además de integrar una asociación ilícita. El penado es Cristian Emanuel “Camello” Urraco, quien según los investigadores era la mano derecha de Alexis y su primo Fernando “Andy” Caminos en el despliegue de violencia en la zona de avenida Abanderado Grandoli y Lamadrid.
La fiscal Viviana O’Connel expuso el contexto del accionar de Camello en el marco de un conflicto entre dos familias, una pugna atravesada además por la disputa para el control del territorio para la venta de droga. “A partir de los conflictos armados y usurpaciones sistemáticas, que se suscitaron en el barrio Municipal ocasionando heridos de arma de fuego y homicidios, se determinó la existencia de dos organizaciones criminales, siendo que en una se nombran a varios integrantes de la familia Funes; en tanto que la restante estaría liderada por la familia Caminos”, señaló el legajo de investigación.
En esa disputa O’Connel detalló que Camello “cumplió un rol destacado en la banda, identificado como mano derecha de Andy Caminos y sindicado en numerosas declaraciones de testigos de identidad reservada como un integrante primordial de la banda liderada por Alexis, y partícipe de numerosos hechos de usurpación y amenazas coactivas. Desplegando violencia contra las víctimas, tratándose de familias enteras a las que se amedrentaba para hacerles abandonar sus viviendas y consolidar el predominio territorial de la organización delictiva”.
Alexis Caminos sumó una acusación como jefe de una asociación ilícita
Camello, que está detenido desde junio de 2018, acordó la pena por cinco hechos.
El primero tuvo lugar el 17 de mayo de 2016, a las 2, en Lamadrid al 98 bis. Camello, junto con Alexis Caminos, Juan Manuel “Juanchi” Almada, Alan Sosa, Andy Caminos y otro joven apodado Enano se presentaron en el departamento 118 de Lamadrid 98 “portando armas de fuego y compelieron a las víctimas a abandonar su domicilio agarrándolas de los pelos, golpeándolos con la culata de un arma en la cabeza y efectuándoles golpes de puño, rompiendo elementos de la vivienda, manifestando que se tenían que ir porque habían matado a Leo Sánchez para luego comenzar a sustraer todos los muebles quedando la casa vacía la cual fue ocupada por Camello y su familia”.
También se atribuyó a Camello que esa misma noche alrededor de las 3, él y parte de la gavilla se presentó en el departamento 139 con armas de fuego y compelieron a las víctimas y a sus familias a abandonar su domicilio.
El mismo accionar le atribuyeron a Camello en torno de un departamento de la zona conocida como las pasarelas de Grandoli y Gutiérrez, la noche del 2 de junio de 2016. Además de echar a los propietarios, los agresores vandalizaron la propiedad, detalló la imputación.
La víctima de esta usurpación, de la familia Funes, dijo por esos días en una entrevista con la Fiscalía: “Cuando estaba Pimpi (por Roberto, el jefe de la barrabrava leprosa asesinado en 2010) era otra cosa, había otros códigos, no dejaba que molestara a la gente del barrio. Después cuando vino el pendejo. Eso cambió todo. Siempre se vendió ahí, pero Pimpi era un muchacho grande que no molestaba. El Alexis es quien maneja todo ahí, con sus primos Andy y Juan Pablo Caminos. El que manda ahí es el Alexis. Cuando estaba Pimpi no se tiraban tiros, no te sacaban de los pelos de tu casa, el barrio era tranquilo”.
La siguiente imputación a Camello tiene como eje una Honda Twister 250 que presentaba un pedido de captura un robo del 10 de diciembre de 2016. Camello fue detenido al mando de esa moto en Cepeda y avenida del Rosario, junto con otro muchacho, lo que le valió un encubrimiento agravado.
Otro hecho achacado a Camello es por amenazas coactivas agravadas. El 13 de febrero de 2018 Camello amenazó de muerte exhibiendo un arma de fuego a un hombre de vivía en un departamento de Esteban de Luca 16 bis con la intención de que abandonara el domicilio.
“Mientras duraba la amenaza Camello realizó varias detonaciones contra la casa de la víctima. A consecuencia del ataque, la víctima tomó sus cosas y abandonó su domicilio el cual con posterioridad fue incendiado y dañado con pintadas intimidatorias”, señaló la fiscal.
Las pintadas en la fachada del departamento hacían referencia a Franco Carballo, un joven que fue asesinado a finales de noviembre de 2016: “Esto es por Franco, estos giles lo entregaron Funes. Acá no queremos poner un búnker”.
Camello cayó en flagrancia el 26 de junio de 2018 en barrio República de la Sexta. Fue en Pasco y Esmeralda, zona en la que personal de la Brigada Motorizada acudió a un alerta del 911 por detonaciones y lo detuvo pese a que vecinos se interpusieron.
En un techo los uniformados hallaron la pistola 9 milímetros que –aseguraron– Camello había arrojado en pos de ocultarla. La acción le valió un expediente por portación de arma de fuego.
Con base a esos cinco delitos atribuidos, Cristian “Camello” Urraco, de 26 años, aceptó su responsabilidad en el marco de un acuerdo entre su defensa y la Fiscalía, el cual fue homologado este viernes por el magistrado José Luis Suárez y lo condenó a la pena de 9 años y 6 meses de prisión efectiva.
Por la banda de Alexis la Justicia provincial imputó a 23 personas como miembros de asociación ilícita. En este marco, más de la mitad de los imputados ya fueron condenados a penas de entre tres años de cárcel condicional hasta 27 años y medio de cárcel, como es el caso de Fernando Andrés “Andy” Caminos, quien unificó en esas penas varios delitos que incluyen un par de homicidios.
Entre quienes cerraron sus abreviados están Clara Jaime, Maximiliano Verón y Micaela Faure, quienes contaban con prisión domiciliaria ya que no se le atribuían delitos graves.
Otros miembros de la asociación ilícita que admitieron sus condenas son Matías Rodríguez, Mariela Urraco, hermana de Camello, Fidel Antonio Caminos y su hija Caren, Nélida Aguirre, Antonela Caminos, Matías Caminos y Alan Sosa. A esa lista ahora se sumó Camello.
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