Los integrantes del Taller Ecologista volvieron a cruzar el proyecto que discute el Concejo Municipal para regular la entrega de bolsitas de plástico en supermercados.
Desde esa agrupación aseguraron que la iniciativa tiene “graves errores conceptuales que abren un camino equivocado para abordar la cuestión ambiental”.
A través de un comunicado, el Taller Ecologista indicó que “es un absurdo poner cada vez más recursos para hacer un poco mejor (o menos peor) un producto efímero y que debería evitarse, en vez de decidirse realmente reducir el uso de descartables en favor de opciones durables como el bolso de los mandados”. Y añadieron: “Las bolsas estandarizadas siguen siendo desechables, a lo sumo se utilizan una vez más para sacar la basura y no mucho más. Se siguen poniendo recursos en el lugar incorrecto, en lugar de propender a cambiar nuestros hábitos insustentables (sic) de consumo”.
El proyecto impulsado por la concejala María Julia Bonifacio, y que ya pasó por varias comisiones, promueve la utilización de bolsas reutilizables y la separación de residuos.
En particular establece que los supermercados, hipermercados y autoservicios sólo podrán entregar para el acarreo de sus ventas, bolsas plásticas de color negro y naranja según lo establecido en las normas Iram 13610 (45×55 cm y 55×60 cm).
Estos comercios entregarán hasta cuatro bolsas gratuitas por compra (dos naranjas y dos negras), y en caso de que el cliente pida más, se le cobrará por cada envase.
El Taller Ecologista sostuvo que “si bien para la industria plástica la estandarización forma parte de una estrategia para supuestamente responder a las preocupaciones acerca de los impactos ambientales de las bolsas descartables, es una respuesta que nada cambia y que desvía la discusión de las verdaderas soluciones. Por el contrario, refuerza y consolida el consumismo al darle un maquillaje ambiental a la propuesta y sostener sistemas productivos y de consumo insustentables (sic)”.
Y recalcan que “la norma Iram establece tamaños y espesores un poco mayores que en las bolsas comunes; esto conduce a utilizar menor cantidad de bolsas, pero debido a que cada bolsa contiene más plástico, la cantidad total de plástico usada sigue siendo la misma. Ninguna mejora ambiental, al contrario, son tiempo y recursos que se pierden”.
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