Un chico de 15 años está internado en el Heca en grave estado como consecuencia de los cuatro balazos que recibió el sábado en barrio San Francisquito. Su familia señaló a un ex policía de 51 años como autor de los disparos y aseguró que el chico andaba en moto con un amigo corriendo picadas cuando el ex agente abrió fuego contra ellos. El adolescente recibió cuatro disparos en el tórax y el agresor estuvo a punto de gatillarle en la cabeza, pero fue detenido por una vecina. La versión familiar es diametralmente opuesta a la de voceros oficiales, que está basada en el testimonio del ex funcionario policial, que alegaron intento de robo y dijeron que el joven estaba fuera de peligro.
El sábado a las tres de la tarde Leo, de 15 años, salió de su casa en Alsina al 3000 a cargarle nafta a la moto. Había comido con su familia un sándwich de milanesa con una gaseosa y partió con Bocacha, su amigo y compañero de juegos en la Play y picadas a toda velocidad por las calles del barrio San Francisquito. Una hora y media después, Bocacha volvió a la vivienda. Estaba agitado y gritaba que le habían disparado a Leo a unas diez cuadras, en pasaje Santa Isabel al 3500.
En diálogo con El Ciudadano, Mabel, la mamá de Leo, y sus cinco hermanas reconstruyeron lo que pasó durante la tarde del sábado. Pasadas las 16, Leo y Bocacha pasaron por el pasaje Santa Isabel al 3500 a bordo de una moto cuando un hombre de unos 50 años salió a la vereda y empezó a dispararles con un arma nueve milímetros.
Leo cayó herido a los pocos metros. Como pudo, y en compañía de su amigo, llegaron a pie hacia la esquina de Saavedra, doblando en dirección a Constitución.
Pero el agresor los siguió y los alcanzó. A esa altura, Leo había quedado recostado en la vereda y el hombre le apuntó en la cabeza con el arma, pero una vecina se interpuso.
“La señora vive en esa cuadra y estaba en la calle. Lo ayudó a Leo, le dijo al señor que tenga piedad, que era sólo un chico”, contó una de sus hermanas.
El autor de los disparos es Hugo F., un agente policial retirado de 51 años, conocido en el barrio por “ser violento” y siempre insultar a los corredores de picadas.
“La vecina le salvó la vida. Leo le dijo a Bocacha que nos vaya a buscar y la señora se quedó cuidándolo mientras llegaba la Policía”, agregó. Cuando la familia llegó al lugar, todavía no se había hecho presente la ambulancia y Leo se desangraba. “Los agentes no hacían nada, hasta que un Policía joven se apiadó de nosotros y nos llevó al Heca”, contó.
Según la familia de Leo, un rato después de haber partido al hospital, varias personas efectuaron disparos contra la casa del ex policía y “plantaron un arma” en la calle.
Además, negaron que los chicos estuvieran armados.
Versión oficial
La versión de lo que pasó el sábado brindada por voceros judiciales es diametralmente opuesta a la relatada por la familia. Según los investigadores, esa tarde un joven de 27 años identificado como Guillermo Z., fue a la casa de su suegro, Hugo F., el ex agente policial. Cuando estaba en la vereda, el muchacho fue abordado por dos pibes que le quisieron robar la moto. Guillermo se identificó como empleado policial y empezó un tiroteo, en el cual Leo recibió un disparo en la pierna izquierda. Según esta versión, Hugo estuvo involucrado en la balacera por el sólo hecho de que el frente de su casa recibió disparos. Además, voceros judiciales sostuvieron que Leo estaba fuera de peligro y que quedó imputado por robo y a disposición del Juzgado de Menores.
Sin embargo, desde el sábado a la tarde Leo está internado en terapia intensiva del Heca en coma farmacológico. Recibió cuatro disparos en el tórax y ya pasó dos veces por el quirófano (la última ayer a la tarde). Su estado seguía siendo delicado.
La versión judicial difiere incluso con lo relatado por voceros policiales, quienes sostuvieron que fue Hugo quien salió a la vereda y empezó a disparar ante el intento de robo a su yerno. Además, en la información brindada por fuentes policiales no queda claro si el herido es Guillermo o el menor de 15 años. De hecho, durante el domingo la noticia replicada en los medios locales dio cuenta de que el baleado era el yerno de Hugo, quien se encontraba en estado reservado. Asimismo, los pesquisas sostuvieron que se secuestró un arma calibre 32 y una moto Honda Wave.
Solos en el Heca
Lo que sí quedó claro es que hasta ayer los familiares de Leo no habían sido entrevistados por ningún funcionario judicial y se mostraron preocupados porque sólo escucharon difamaciones sobre el adolescente de 15 años. “Nadie vino a preguntarnos qué pasó. Mi hijo se está muriendo y es un nene que tenía toda la vida por delante”, dijo Mabel.
El hecho es investigado por el Ministerio Público de la Acusación y la comisaría 18ª, con jurisdicción en la zona.
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