Un adolescente de 16 años fue asesinado en las primeras horas de ayer cuando estaba celebrando el año nuevo en la calle, en el sur de la ciudad. Según vecinos, durante la madrugada un centenar de jóvenes llegó a Centenario y Entre Ríos desde una fiesta callejera que había sido suspendida por la Policía, en Tiro Suizo. En medio de estos festejos, Brandon Cardozo recibió un disparo en el mentón y murió a los pocos minutos, antes de llegar al hospital Roque Sáenz Peña. Para la Fiscalía de Homicidios Dolosos, el chico se peleó con otros jóvenes, que le dispararon desde un auto. Sin embargo, sus amigos desmintieron esta versión y dijeron que Brandon recibió el disparo cuando quedó en medio de una pelea entre dos bandas.
Los festejos por el comienzo del Año Nuevo habían sido convocados por Facebook. La cita era en Raffo al 5100, frente al club Tiro Suizo. Pasada la medianoche, la cuadra ya estaba llena de jóvenes que habían llegado en autos y motos, con música y conservadora en mano. Pero la fiesta no duró mucho. Varios móviles policiales llegaron al lugar y suspendieron los festejos.
Enseguida, la convocatoria volvió a surgir a diez cuadras, esta vez en Centenario y Entre Ríos. Para los vecinos, el motivo de la elección de este lugar fue otra fiesta que se había hecho dos años antes en esa esquina. “Esa vez la cuadra se llenó de gente. Un año después iban a hacerla de nuevo, pero varios vecinos no quisieron. Igual parece que la esquina quedó instalada”, dijo un habitante del barrio.
Lo cierto es que, durante la madrugada, a la zona llegaron unos cien jóvenes en autos y motos. La música empezó a sonar y los festejos se reanudaron, mezclados con los de los vecinos de la cuadra que celebraban en la vereda.
Brandon Cardozo llegó con su primo y sus amigos. Según la versión judicial, alrededor de las 4.30 le dispararon desde un auto producto de una discusión. Recibió un disparo en el mentón, con salida en la nuca, en Centenario al 1200, aunque cuando llegó la Policía fue encontrado en la misma calle pero a una cuadra, al 1300. El adolescente fue llevado por los uniformados al Roque Sáenz Peña, pero al llegar ya había muerto.
La versión oficial fue desmentida por amigos de Brandon en las redes sociales. Según estos testimonios, Brandon no fue parte de ninguna pelea. Por el contrario, dijeron que dos bandas que “se tenían bronca” se tiraron botellazos, hasta que empezaron los tiros.
Brandon les gritó a sus amigos que corrieran y él hizo lo mismo en otra dirección. En ese momento fue alcanzado por una de las balas en el cuello. “Brandon no tenía nada que ver con el problema que se armó. Fue como un chico más a divertirse, él nunca se peleó con nadie. La bala llegó directo al cuello por una muy mala suerte. Así como a él le dieron el tiro, mucha gente inocente ligó botellazos y terminó herida”, describieron ayer el crimen sus amigos.
Brandon vivía a unas diez cuadras del lugar donde fue asesinado, en la esquina del Vuelta de Obligado y Savio, al límite con el barrio Tiro Suizo. Sus vecinos lo recordaron como un “pibe de diez”, que siempre ayudaba a su mamá, le gustaba estudiar y patinar y jugaba a la pelota con los chicos del barrio. Ayer, en la primera tarde del 2016, la familia y los amigos de Brandon se juntaron en el patio de su casa. Sentados en una ronda, los festejos quedaron lejos y el barrio permanecía en silencio.
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