Doce personas fueron imputadas este jueves por participar en una fiesta clandestina en zona noroeste. En el lugar, los uniformados secuestraron una pistola ametralladora FM PAM1 9 milímetros que estaba arriba de la mesa y otra pistola del mismo calibre en una mochila dentro de un lavarropas donde además había drogas, dinero y celulares. Tres de los acusados, sindicados como los organizadores y moradores de la casa, quedaron detenidos preventivamente. Pero no fueron los únicos, un hombre de 36 años, arrestado con una escopeta en Tarragona al 1900 bis donde se desarrollaba un encuentro ilegal y otro que facilitó su casa para un reunión clandestina en Castagnino al 1600 y se le secuestró un revólver.
Pasadas las 8 del feriado del 25 de mayo, un llamado anónimo alertó sobre música a alto volumen y personas ocasionando disturbios. Personal policial siguió las indicaciones y llegó hasta un departamento de pasillo ubicado en Juan B. Justo al 7700. Allí fueron atendidos por una mujer, quien dijo ser la propietaria. Desde la puerta, los uniformados observaron una ametralladora sobre la mesa, contó el fiscal Marcelo Maximino en la audiencia.
Los policías ingresaron a la casa, varias personas corrieron hacia el fondo y algunos de ellos fueron atrapados. En total, hubo una docena de personas detenidas. Además de la ametralladora que tenía 21 municiones intactas en su interior, secuestraron en el tambor de un lavarropas una mochila con un pistola 9 milímetros, estupefacientes fraccionados en dosis, cinco celulares y casi 170 mil pesos. También incautaron una moto y un auto.
A la dependencia policial
Terminaron en la dependencia policial: Jonatan A., María Milagros C., Juan Sebastián G., Tomás S., Aldana R., Milagros A., Agustina U., Franco C., Selene A., Brian P.S., Yamila A y Joana B. Este jueves el grupo fue imputado por haber desobedecido las restricciones dispuestas por el Poder Ejecutivo Nacional (DNU 334/21) y Provincial (Decreto 700/2021) para evitar la propagación de una epidemia. También por tenencia de arma de guerra.
La mayoría del grupo recuperó la libertad con restricciones por acuerdo de partes a excepción de los habitantes de la vivienda donde se estaba desarrollando la fiesta clandestina. Jonatan Manuel A., María Milagros C. y Juan Sebastián G., quedaron detenidos preventivamente hasta la realización de una audiencia preliminar aunque si en 45 días no se presenta requerimiento acusatorio o un procedimiento abreviado se autorizó a las defensas a solicitar la revisión de la medida cautelar.
En este caso el juez Gustavo Pérez de Urrechu, quien presidió la audiencia entendió, que estas personas tenían armas de guerra para lo que no contaban con autorización en su casa en el marco de una fiesta clandestina en clara violación al las normas vigentes para evitar la propagación del coronavirus.
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Otras dos clandestinas con armas
El juez Alejandro Negroni dejo detenido preventivamente por 60 días a un hombre de 36 años que fue imputado por portar una escopeta en la puerta de su domicilio donde se estaba llevando adelante una fiesta clandestina.
El hecho ocurrió también el 25 de mayo por la mañana en avenida Santa Coloma y Tarragona. Un llamado alertó a la central de emergencias que había una persona con una escopeta en la puerta de una casa. Cuando llegaron los uniformados se toparon con el sospechoso manipulando un arma en la puerta de una casa donde había encuentro clandestino en Tarragona al 1900 bis, en el barrio Hostal del Sol de la zona noroeste.
Además del apresado por tener la escopeta, los pesquisas detuvieron a 18 personas que participaban de la fiesta clandestina y secuestraron 8 botellas de champagne, 2 de vodka y dos equipos de música. Iván Gabriel V. fue imputado por el fiscal Marcelo Maximino por los delitos de portación de arma, desobediencia y violación de las medidas dispuestas para evitar la propagación de una epidemia y quedó detenido preventivamente por dos meses.
El otro hecho ocurrió en Castagnino al 1600 también el feriado para conmemorar la Revolución de Mayo. Cerca de las 5, personal policial llegó hasta el domicilio donde seis personas estaban reunidas en barrio Parque Casas de zona norte. Secuestraron un revolver calibre 357.
El dueño de casa identificado como Hugo Carlos F. marchó preso y fue imputado por el fiscal Maximino por tenencia de arma de guerra, desobediencia y violación de las medidas dispuestas para evitar la propagación del Covid.
El juez Gonzalo López Quintana resolvió dictar la prisión preventiva en su contra por el plazo de ley.
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