Edición Impresa

Ahorcaron a Alí el Químico, primo hermano de Saddam

En 1988 ordenó gasear la ciudad de Halabja, matando a más de cinco mil personas, lo que le valió el apodo.

Alí Hassan al Majid, alias Alí el Químico, primo hermano y mano derecha del extinto presidente iraquí Saddam Hussein sobre el que pesaban cuatro condenas de muerte, en particular por la matanza de miles de kurdos en 1988, fue ahorcado ayer en Bagdad. Esta ejecución, más de tres años después de la del ex presidente de Irak, quien fue ahorcado en diciembre de 2006, llenó de alegría a los habitantes de la región autónoma del Kurdistán, que lo apodaban “el carnicero”.

“El condenado Alí Hassan al Majid fue ejecutado por ahorcamiento hasta la muerte conforme a la ley y la Constitución debido a los asesinatos y al crimen contra la humanidad cometidos”, anunció el portavoz gubernamental Alí Dabagh en un comunicado. El funcionario aseguró asimismo que el ajusticiamiento se produjo “sin ningún disturbio, ni gritos de alegría o palabras ofensivas”.

La noticia de la ejecución de Al Majid se difundió poco después de que atacantes suicidas mataran al menos a 38 personas e hirieran a otras 80 al hacer estallar varios coches bomba en el centro de Bagdad (ver aparte). El vocero gubernamental señaló que los atentados representaban “una expansión” de las acciones de los insurgentes vinculados al régimen depuesto de Saddam Hussein, pero no aseguró que pudieran ser una represalia por la muerte de Al Majid.

Alí el Químico murió ahorcado, con el mismo sistema aplicado contra su primo Saddam el 30 de diciembre de 2006. Alí el Químico estaba considerado el más brutal representante del régimen de Saddam, con el que guardaba un gran parecido físico y a cuya sombra creció políticamente. Dabagh dijo que las autoridades tienen en su poder el testamento de quien fue ministro de Defensa y del Interior de Saddam, que establece que se entregue su cadáver a su familia, decisión que será adoptada.

El 17 de enero pasado Alí el Químico fue condenado a muerte por cuarta vez, por la matanza en 1988 de 5.000 kurdos. Cuando se emitió el veredicto, el reo declaró: “Al hamdulila, al hamdulila” (Alabado sea Dios). Fueron sus últimas palabras en público.

Primo hermano de Saddam Hussein, fue durante más de 35 años su hombre de confianza, dispuesto a todo con tal de aplastar el mínimo conato de revuelta en Irak.

En 1988 ordenó gasear la ciudad kurda de Halabja, en el norte de Irak, matando a miles de personas, entre las que había mujeres y niños, lo que le valió el apodo de Alí el Químico. Por eso muchos kurdos de Suleimaniya estallaron ayer de júbilo al enterarse de su muerte. “Alí el Químico merece su suerte. Es un día histórico para el pueblo kurdo e iraquí”, se congratuló el ministro de los Mártires y los Desplazados del gobierno autónomo del Kurdistán, Majid Hamed Amin.

En tanto, el sur de Irak los chiítas también estaban exultantes. “Lamentamos que esta ejecución haya tardado tanto”, dijo Latif al Hamidi, del Consejo Supremo Islámico de Irak en Nayaf, uno de los principales partidos chiítas reprimidos por Saddam, quien al igual que Alí el Químico pertenecían a la rama sunnita del Islam, minoritaria en Irak.

Alí el Químico nunca tuvo remordimientos por su accionar. “Fui yo quien dio las órdenes al Ejército de destruir los pueblos y de realojar a los lugareños. No me defiendo de ello. No me disculpo. No he cometido error”, había dicho refiriéndose a la represión de la rebelión kurda contra Saddam en 1987-1988, que causó 180.000 muertos.

Al igual que Saddam, era oriundo de la región norteña de Tikrit, donde nació en 1941, según el Tribunal Penal, y en 1944, según declaró él. Entregado en cuerpo y alma a su primo, supervisó la ocupación de Kuwait y de agosto a noviembre de 1990 fue el gobernador de este país, “la 19ª provincia” de Irak como la llamaba el gobierno de Bagdad, mientras estuvo bajo ocupación iraquí.

Comentarios

10