Un revolver calibre 22 de color negro y tambor plateado –sin balas– y media tijera de 10 centímetros de largo, con manchas de sangre, son los elementos secuestrados por la Policía tras una gresca que, fuera de lo común, ocurrió en el interior de un ómnibus del transporte urbano de pasajeros. El episodio, que por fortuna dejó sólo dos heridos leves, una joven pareja que integraba el pasaje, volvió a poner en evidencia una problemática que genera cada vez mayor demanda de respuestas: la seguridad de choferes y pasajeros a bordo de los colectivos.
La agresión ocurrió ayer pasado el mediodía en el interno 149 de la línea 121 de la Semtur. Entre el pasaje viajaba una pareja –según versiones fueron dos las involucradas– integrada por Alexis V., de 19 años y Micaela G., de 18 años, cuando ascienden a la unidad tres jóvenes, todos varones, entre quienes se encontraba Franco Emanuel A., de 18 años. No está claro qué ocurrió –todo indica que las partes en conflicto se conocían– pero pronto comenzó un entredicho que fue subiendo de tono hasta que, cuando el colectivo atravesaba avenida Presidente Perón a la altura de calle Gutemberg, la pelea verbal desbordó en violencia física.
La agresión comenzó con golpes hasta que Franco A. empuñó el revólver 22 con el que siguió golpeando a la pareja, a la vez que amendrentaba al resto de los pasajeros y al chofer. Y otro de los jóvenes que viajaba con él habría sido –no está confirmado– quien empuñó la media tijera, a modo de faca, atacando también a la pareja.
Todo terminó con los integrantes de la pareja lastimados y el agresor bajándose
precipitadamente del ómnibus tras gatillar en falso hacia el interior.
La pareja fue trasladada al Heca por un móvil del Comando Radioeléctrico, donde Alexis V. fue atendido por heridas cortantes en el antebrazo izquierdo, mientras Micaela G. por lesiones leves. El chofer del ómnibus describió a los atacantes en la comisaría 13ª del barrio Bella Vista, la jurisdicción donde ocurrió la trifulca, y tras un patrullaje, personal policial ubicó a los jóvenes buscados en 27 de Febrero y Lima. Según fuentes de la UR II, los jóvenes intentaron escapar apenas escucharon la voz de alto y, en medio de la carrera, Franco A. arrojó el arma de fuego debajo de una camioneta. El joven fue capturado y así la Policía recuperó el revolver y también la media tijera, que había quedado en el piso del colectivo.
La situación sumó ahora a la línea 121 a la lista cada vez mayor de episodios violentos que ocurren en unidades en servicio del transporte urbano, y que ponen en riesgo la integridad de choferes y pasajeros. En los últimos meses se sucedieron robos desde el interior, ataques con piedras desde el exterior y rotura de unidades desde las dos partes.
En ese marco, el ex concejal Alberto Cortés recordó que a mediados de 2012 presentó una iniciativa para instalar cámaras de seguridad en los colectivos urbanos ubicadas en receptáculos de protección: la idea del edil es que, para que la inversión no resulte demasiado onerosa, se alternen dispositivos en funcionamiento con dispositivos falsos con una intención “disuasiva”.
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