A menos de dos días de la veda electoral, los principales candidatos a ocupar la Jefatura de Gobierno de la ciudad de Buenos Aires cruzaron ayer acusaciones por una supuesta campaña sucia que incluye encuestas telefónicas, spots televisivos y afiches publicitarios truchos.
El postulante del Frente para la Victoria (FPV), Daniel Filmus, apuntó al actual mandatario Mauricio Macri por la aparición de llamados telefónicos a hogares al azar de la ciudad, en los que se lo vincula con el ex apoderado de la Fundación Madres de Plaza de Mayo, Sergio Schoklender, acusado por lavado de dinero y defraudación al Estado.
Por su parte, Macri denunció mentiras en una última serie de spots televisivos del kirchnerismo, mientras que el espacio que lidera Fernando Pino Solanas negó haber sido autor de los afiches que refieren a la polémica en torno a las Madres de Plaza de Mayo.
Por los llamados telefónicos, Filmus presentó un escrito ante la jueza con competencia electoral, María Servini de Cubría, en el que acusó al macrismo por el sondeo telefónico que –según entendió– busca “desgastar” su imagen.
“¿Considera que Filmus ha sido afectado por el caso Schoklender?”, comienza la medición. Si el encuestado responde que no, automáticamente se corta el llamado, pero si dice que sí, el sondeo continúa con otras preguntas sobre el senador nacional.
“¿Sabía usted que el padre de Filmus es arquitecto y trabajaba en el proyecto de viviendas por el que Sergio Schoklender se encuentra investigado?”, afirma también la encuesta telefónica, que finaliza con otra pregunta: “Ahora que usted sabe esto, ¿lo votaría?”.
En declaraciones al canal C5N, el senador kirchnerista aseguró que es “una falta de respeto total caer en esta bajeza para engañar a los votantes”.
“Lo más grave es que hayan sido cientos de miles de llamadas”, enfatizó Filmus y agregó: “Esto afecta a mi familia. Mi papá tiene 88 años, una vida hecha desde el trabajo y no terminó la escuela primaria”.
A su vez, el candidato a vicejefe de Gobierno del FPV, Carlos Tomada, dijo que Macri “se dedica a estas cosas, a las escuchas, a los espías” para “embarrar la cancha”. “Bueno, es que están nerviosos”, subrayó el candidato en declaraciones radiales.
Según dijo, “está claro que el macrismo” es también el autor de los afiches que aparecieron en las calles porteñas, que lo muestran a él, junto a Filmus y Schoklender.
Tras la acusación, Macri negó que el PRO haya promovido esas campañas y arremetió con que el kirchnerismo es quien “miente”, pero con sus spots televisivos en los que se muestra a la presidenta Cristina Kirchner y la serie de obras desarrolladas por la Nación en el distrito.
“Me impresiona que hayan puesto en un aviso que hicimos 450 metros de subte, cuando hicimos más de 8 kilómetros, es como decir que ya vale todo, el Indec ha contagiado a todos los sectores”, se quejó Macri.
Al respecto, agregó: “Nosotros hemos empezado a resolver problemas de hace 20 años en la ciudad, o de hace 40 años. Estamos lejísimos de resolver todos los problemas, pero estamos trabajando. Deberían hacer propuestas en vez de agredir de manera permanente”.
Yo señor, no señor
El tercero en discordia, el candidato Fernando Pino Solanas, rechazó que el Movimiento Proyecto Sur haya mandado a pegar los afiches que afirman: “Ganándole a Filmus estamos en segunda vuelta”, sobre una imagen de Tomada, Filmus y Schoklender.
Los carteles, que aparecieron pegados en distintos lugares de la ciudad de Buenos Aires, también dicen: “Una Ciudad Tomada + Filmus”.
El cineasta se desligó del caso y dijo en declaraciones a la prensa que Proyecto Sur hizo una campaña “sin difamaciones ni chicanas”.
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