La Secretaría de Género y Derechos Humanos de Rosario recibió 29 situaciones de acoso en el espacio público en lo que va de 2023. Fueron informadas a través de la línea telefónica 147 y representan casi la mitad que el total registrado en 2022. Si bien no todas las situaciones se denuncian ante la Fiscalía de Faltas, ya que es voluntario, desde el área entienden que la problemática está más visibilizada, y que las campañas informativas y la incorporación al Código de Convivencia Ciudadana aportaron a su desnaturalización.
“Todavía tenemos grandes desafíos en relación con la transformación de las prácticas sociales que reproducen la discriminación y la violencia de género, de la cual el acoso callejero es una expresión muy frecuente. Hay un trabajo que estamos haciendo como sociedad desde las instituciones, las universidades, las áreas del Estado, que tiene que sostenerse y profundizarse. No vamos a erradicar la violencia de género si no garantizamos la implementación efectiva de la Educación Sexual Integral en todas las escuelas, porque es fundamental que las y los niños tengan formas más igualitarias de socialización. También necesitamos políticas públicas destinadas a varones, como las que impulsamos desde la Secretaría de Género y DDHH, para pensar la masculinidad en clave de género y poder repensar los mandatos y estereotipos que abonan a la reproducción de las violencias. Son aspectos centrales y urgentes del cambio cultural”, dijo la secretaria de Género y Derechos Humanos, Mariana Caminotti.
Y agregó: “Nuestra sociedad tiene pendiente el tema de la redistribución de las tareas de cuidado. En promedio, las mujeres seguimos dedicando más del doble de horas que los varones a las tareas de crianza, de sostenimiento de los hogares o espacios comunitarios en los barrios, de cuidado de infancias y personas mayores. Y esas horas de trabajo no remunerado son una riqueza invisible que sostiene al resto de las actividades económicas. Dicho de otra manera, buena parte del funcionamiento de la economía se sostiene en el trabajo impago de las mujeres y las niñas. Eso marca una desigualdad estructural que condiciona la inserción en el mercado laboral, en los ingresos y también en la cultura en un sentido amplio. Necesitamos cambios estructurales que son costosos, pero muy necesarios”.
Acoso callejero
En abril de 2019 se incorporó el acoso sexual callejero como un tipo y modalidad de violencia contra las mujeres en el espacio público a la ya sancionada ley 26.485 de Protección Integral para Prevenir, Sancionar y Erradicar la violencia contra las mujeres. El acoso callejero es la violencia ejercida contra las mujeres o disidencias por una o más personas en lugares públicos o de acceso público, como medios de transporte o centros comerciales, a través de conductas, expresiones verbales o no verbales con connotación sexual que afectan o dañan la dignidad, integridad, libertad, libre circulación o permanencia, o generan un ambiente hostil u ofensivo.
El nuevo de Código de Convivencia de Rosario incorporó el acoso sexual callejero en agosto de 2022 como una falta contemplando como tal “a las agresiones físicas, verbales y/o gestuales de contenido obsceno contra quien no consiente dichas acciones”, con el objetivo de establecer un límite frente a comportamientos que hasta hace algunos años eran naturalizados o pasaban desapercibidos.
El Código de Convivencia prevé la posibilidad de una sanción, junto con acciones de sensibilización y prevención para el cambio de comportamientos y actitudes. Desde la secretaría de Género entienden que es fundamental “buscar la transformación de una cultura patriarcal que reproduce el acoso, la discriminación y la violencia contra mujeres, niñas y personas LGBTIQ+”.
Desde el área, remarcan la importancia de denunciar las situaciones de acoso para sacarlo de la esfera personal y darle la entidad pública que el problema tiene. Además, la denuncia habilita una sanción -en este caso, una multa- y la obligación complementaria de hacer actividades educativas para la reflexión y la transformación de imaginarios que lo naturalizan.
Acoso callejero: 9 de 10 mujeres y disidencias sufrió algún tipo de agresión en la calle
“Las denuncias permiten generar estadísticas y tener mejor información pública oficial sobre la magnitud, la localización y las características del problema en el ámbito de nuestra ciudad. Esa información es clave para la elaboración de políticas basadas en la evidencia, que puedan ser más oportunas y eficaces (como campañas públicas, programas, intervenciones barriales)”, señalaron desde la Secretaría de Género y destacaron el trabajo conjunto con la Secretaría de Control y Convivencia para que las y los agentes que se desempeñan en el espacio público tengan capacitaciones para prevenir y, en caso necesario, actuar frente a situaciones de acoso. “Se está formando al personal municipal para una mejor identificación de estas situaciones y el desarrollo de buenas prácticas de intervención, entendiendo que este conocimiento facilita las tareas y les da claridad”, destacaron.
Cómo denunciar
Para informar una situación de acoso y recibir asesoramiento está disponible la línea 147. La Secretaría de Género y Derechos Humanos contacta a la persona afectada, la contiene y asesora, atendiendo a las particularidades de cada situación.
También puede hacerse una denuncia online en www.rosario.gob.ar
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