Ciudad

“El ambiente está caldeado”

Desde Amsafé Rosario adelantaron que el mes entrante podrían comenzar a movilizarse en reclamo de otro aumento salarial. Hoy presentarán su propio relevamiento sobre los colegios que están sin gas.

Luego de que la ministra de Educación de la provincia Élida Rasino “ninguneara” el pedido de la delegación local de la Asociación de Magisterio de Santa Fe (Amsafé) de abrir la negociación salarial debido a la creciente inflación, desde la entidad gremial sostuvieron ayer en diálogo con El Ciudadano que, de acuerdo al mal humor reinante entre los docentes, existe una clara posibilidad de que en agosto comiencen a llevarse a cabo distintas movilizaciones en la ciudad para solicitar un nuevo incremento. Dichas medidas podrían ser decididas la próxima en la reunión de delegados prevista. “El ambiente está caldeado. Hoy la plata no alcaza; la inflación se lleva puesto todo”, sostuvo Daniel Couselo, el flamante titular de la seccional local de la organización que defiende los intereses de los maestro de escuelas públicas.

Con el comienzo de la segunda etapa del año escolar, los cruces entre los representantes de los docentes y el gobierno provincial comenzaron a hacerse de a poco más reiterativos. Desde el lunes, Amsafé se encuentra llevando a cabo un relevamiento en torno de los inconvenientes con la calefacción que, según el gremio, padecen varias instituciones de la ciudad. En concreto, y si bien los resultados finales van a ser dados a conocer hoy a las diez de la mañana en conferencia de prensa, en la organización ya adelantaron que son unas 40 las escuelas que están con problemas de suministro de gas.

Además, desde el gremio explicaron que esta situación tuvo durante esta semana su consecuencia en las aulas, ya que afirman que se registró una baja en la asistencia de alumnos a causa del frío. En tanto, el lunes pasado, en el Colegio Nº 88 Juana Manso, donde el gobernador Hermes Binner participó del inicio del ciclo lectivo, el mandatario había reconocido que de las 500 escuelas que hay en la provincia sólo faltaba calefaccionar 39. Si bien todos parecen decir más o menos lo mismo, Binner destacó que fue mucho lo realizado y que antes de su gestión eran muchas más las instituciones sin el vital servicio. “Estamos trabajando arduamente para que la educación pueda estar a la altura de lo que necesita la provincia después de tantos años de atraso”, remarcó, apuntando sus críticas a las administraciones anteriores.

Sin embargo, el conflicto de fondo (aunque muchas veces los docentes no quieran plantearlo de esa manera) sigue siendo la cuestión salarial. Anteayer, en la sede de gobernación local y en el marco de otros anuncios para los maestros, la ministra Rasino le quitó relevancia al pedido de Amsafé Rosario de que se abra una nueva negociación salarial. “Una delegación local no puede tramitar la reapertura de la mesa paritaria. Ésa es una competencia del gremio a nivel provincial. Y nosotros de momento no estamos trabajando en ese tema”, explicó ante la insistencia de los medios.

Al respecto, Couselo en diálogo con El Ciudadano tildó a la funcionaria de “soberbia” y refutó sus dichos buscando apelar a la legitimidad que le otorgaron a su conducción sus “compañeros” docentes en la última elección interna. Y  luego explicó que la próxima semana se llevarán a cabo en la ciudad reuniones de delegados en donde  irán definiendo medidas para agosto. En ese sentido, el dirigente sostuvo que “como viene la mano” es “muy posible” que se llevan a cabo distintas movilizaciones para comenzar a presionar por un incremento salarial y también de las asignaciones familiares, que hoy son de 80 pesos por hijo. Los maestros aspiran a cobrar 180. “El ambiente está caldeado. La plata no alcaza; la inflación es muy grande”, sostuvo el dirigente.

Los docentes públicos aceptaron en marzo la propuesta de aumento salarial del gobierno, que promediaba un 22,5 por ciento a cobrar en dos etapas. Partiendo de los 2.030 pesos que ganaba hasta ese momento un maestro de grado sin antigüedad, el sueldo trepó a 2.325 pesos en marzo y llegará a 2.420 pesos cuando cobren julio. Si se suma a esos montos el incentivo que paga el gobierno nacional, el cargo inicial –que ha sido tomado como caso testigo– estará casi en los 2.500 pesos.

Comentarios

10