Tres nuevas tomas ilegales de terrenos en los barrios porteños de Villa Lugano, bajo Flores y Barracas se sumaron a las otras tres situaciones similares registradas en el área metropolitana, a partir de la tensa situación generada luego de la ocupación del gigantesco Parque Indoamericano.
A unos 50 metros del club Albariño, de Villa Lugano, cuya cancha de fútbol había sido ocupada ilegalmente el domingo pasado por la noche, se produjo en las últimas horas una nueva toma.
El episodio se inició cuando habitantes de la zona, que como en el primer caso provenían del asentamiento Ciudad Oculta, tomaron terrenos pertenecientes a una empresa de contenedores.
El predio situado en Santander y Timoteo Gordillo pertenece a la empresa Conteman, y fue ocupado por unas 200 familias
En el Bajo Flores un grupo de al menos 50 personas ocupó un predio del Gobierno porteño, luego de enfrentarse con personal policial, que intervino ante una denuncia de los vecinos.
El predio, que fue ocupado durante la madrugada, está ubicado en Riestra y Camilo Torres, informaron fuentes del área de prensa de la Policía Federal, e interviene en el caso la fiscalía contravencional número 12, a cargo del fiscal Martín Longobardi.
La ocupación “comenzó a gestarse anoche, y en un primer momento tiraron piedras al personal policial, que se replegó para evitar un enfrentamiento”, señalaron las fuentes, que agregaron que tomó intervención la comisaría 38, cuyos efectivos permanecen en el lugar.
En tanto, un grupo de personas ocupó esta madrugada un terreno abandonado en el barrio porteño de Barracas.
El grupo de hombres, mujeres y niños instaló varias carpas en un predio situado entre las calles Iriarte, Río Cuarto, Lafayette y la avenida Vélez Sarsfield, de ese barrio de la zona sur de la Ciudad, a metros de la Basílica del Sagrado Corazón.
Los ocupantes aseguraron que provienen de la cercana Villa 21 -uno de cuyos extremos está ubicado a sólo unas cuadras de allí- y que realizaban tareas para desratizar y desmalezar el terreno, que tenía varios años de abandono.
“Necesitamos vivienda y la vamos a pagar. No queremos que nos regalen nada”, dijo uno de los ocupantes en declaraciones a la prensa.
La toma del terreno de Barracas se sumó a la del gigantesco Parque Indoamericano de Villa Soldati; a la cancha de fútbol del club Albariño, en Villa Lugano, a otra en La Matanza y a la del predio en desuso del frigorífico Finexcor, de Quilmes.
En la toma ocurrida en Soldati se produjeron serios incidentes con vecinos que intentaron impedir la acción, los que terminaron con cuatro muertos.
También se produjeron enfrentamientos en Villa Lugano por la reacción de un grupo de jóvenes que se tomó a pedradas con los ocupantes del terreno del club Albariño.
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