Carlos Reutemann y Francisco De Narváez llegaron juntos la semana pasada a la cumbre del Peronismo Federal en el Senado. Antes conversaron a solas sobre la incidencia de Mauricio Macri en el armado del PJ anti kirchnerista y, aunque poco trascendió sobre ese reservado encuentro, apenas unos días después el diputado empresario tachó al jefe del PRO de “derechoso” y “bipolar”.
El veto tácito de Reutemann al desembarco de Macri en el peronismo disidente es cada vez más ostensible. Basta con recordar el antecedente más inmediato de los frustrados coqueteos entre el macrismo y el ex gobernador de Santa Fe.
Ocurrieron el año pasado, en el cierre de listas para las elecciones legislativas, cuando el ahora ex titular del PRO santafesino, Marcelo Muniagurria, expresó su adhesión a la candidatura a senador de Reutemann. Y llamó al electorado macrista a votar al ex piloto de Fórmula 1.
“Hablé con Carlos, le dije que queríamos llevarlo a él en la boleta y me dijo que aceptaba”, reveló Muniagurria, ex vicegobernador de Lole y hombre fuerte de Confederaciones Rurales Argentinas. Reutemann desmintió el acuerdo y Muniagurria terminó renunciando a la conducción de PRO.
Un año después de los comicios de junio, Lole sigue rechazando cualquier intento de fusión con el macrismo, mucho más ahora que el Peronismo Federal se está rearmando y busca un candidato con ADN peronista para 2011.
El sordo rechazo de Reutemann al desembarco de Macri en el peronismo disidente cuenta con el aval de Eduardo Duhalde y Jorge Busti, quien ni siquiera considera a De Narváez un auténtico exponente del PJ. El ex gobernador de Santa Fe busca así evitar que Macri se instale en el trono de candidato presidencial del Peronismo Federal al que todavía él no renunció formalmente.
Por las dudas, desde PRO, también enfrían ahora cualquier chance de alianza electoral con el PJ antikirchneista. “Ni lo descarto ni lo confirmo”, señaló Horacio Rodríguez Larreta en declaraciones radiales, consultado por un eventual acuerdo electoral con el peronismo no kirchnerista, aunque aseguró que “siempre hay lugar para los acuerdos”.
No obstante, el jefe de Gabinete afirmó que el macrismo está “trabajando en construir el PRO en todo el país” y destacó que “el PRO ganó la última elección en Capital y en provincia”. A pesar de haber dejado la puerta abierta a un acuerdo con el Peronismo Federal, Rodríguez Larreta volvió a cuestionar a De Narváez, integrante de ese espacio, y calificó sus declaraciones como “sorpresivas, inentendibles y fuera de lugar”.
“Hace menos de un año estaba festejando con nosotros porque habíamos ganado juntos en la provincia de Buenos Aires. Eso sí es ser bipolar”, señaló el jefe de Gabinete porteño. Además, el funcionario consideró que “esto es justamente lo que (el ex presidente Néstor) Kirchner busca”, en alusión a la división entre Macri y De Narváez que implicaron las declaraciones del diputado.
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