Edición Impresa

Sórdida saga

Vera: detienen a cuatro policías por el caso del empleado judicial

Con otros tres efectivos serán acusados por dejar entrar a la Alcaidía a la hija de Manuel Díaz, quien lo denunció por violación.


Cuatro policías fueron detenidos y otros tres fueron citados a la audiencia imputativa en el marco de la saga que involucra al empleado judicial acusado de abusar de su hija adolescente, informó el Ministerio Público de la Acusación. Todos los uniformados prestaban servicio en la Alcaidía y la comisaría 1ª de Vera, adonde la víctima fue conducida por familiares y pudo entrevistarse con el acusado, lo que se presume fue en connivencia de los efectivos. Tras el escándalo, ese penal policial del norte provincial pasó a la órbita del Servicio Penitenciario.

Por orden autorizada por un juez, solicitada por los fiscales de la Unidad Fiscal de la localidad de Vera, Aldo Gerosa, Martín Gauna Chapero y Leandro Benegas, fueron detenidos ayer cuatro policías: el jefe de la alcaidía de Vera, el comisario Guillermo Starcevich; el oficial de guardia Carlos Paniagua, y el oficial Juan Sánchez fueron detenidos por la mañana, mientras que por la tarde fue arrestado el suboficial Fabricio Visconti. Ellos cuatro y otros tres policías serán sometidos a audiencia imputativa: se trata del jefe y subjefe de la comisaría 1ª de Vera, Claudio Fernández y Fernando Gómez, respectivamente, y otro uniformado de esa dependencia, Atilio Ceferino Visconti.

Los fiscales consideran que al menos seis de los siete policías (sólo se excluye a Atilio Visconti) son partícipes primarios y secundarios en el ingreso obligado a la Alcaidía de Vera de la chica de 15 años llevada a la celda de su padre, Manuel Díaz, denunciado por ella misma de haberla violado en al menos dos oportunidades. Los funcionarios consideran que sin las acciones y/u omisiones de los efectivos no se hubieran podido llevar a cabo los hechos ocurridos el pasado 16 de septiembre.

En esa ocasión, la adolescente fue engañada por su abuela y por su tía, quienes actualmente cumplen prisión domiciliaria por las imputaciones realizadas por la Fiscalía a raíz de su participación en los hechos.

La causa comenzó el 27 de febrero pasado, cuando Díaz, empleado del Servicio Público de la Defensa Penal de Vera, fue denunciado por su hija por sufrir abusos desde que tenía 10 años. En esa oportunidad el hombre fue detenido, pero recuperó la libertad. Por ese tiempo, el abogado del imputado presentó un recurso de revocación de la acusación que fue apelado por la Fiscalía, pero que por falta de definición judicial permitió al empleado ser reincorporado a su trabajo. En los meses siguientes, la Fiscalía dijo estar cerca de elevar la acusación por “abuso sexual con acceso carnal gravemente ultrajante, agravado por el vínculo, y corrupción de menores”, cuando un nuevo ataque por parte del padre lo mandó de nuevo tras las rejas. Díaz fue apresado a finales de junio pasado luego de que el fiscal Benegas describiera que el sábado 20 de junio Díaz abordó a su hija en la calle, la amenazó para que se retractara de la denuncia, le tapó la boca, la llevó a un descampado y abusó de ella. La chica tuvo que ser hospitalizada.

La sórdida secuencia de sometimiento continuó el 16 de septiembre, cuando la adolescente fue llevada bajo engaño a visitar a su padre y abusador hasta su celda en la Alcaidía de Vera, tras el cual Díaz fue trasladado a la cárcel de Las Flores. En tanto, el pasado 2 de octubre la adolescente pudo expresar otro hecho dramático. Contó a su madre que el imputado había asesinado con una maza y un picador de carne a un hijo extramatrimonial, de nombre Jonathan Díaz y de 4 años, y agregó que lo había e