El ministro de Asuntos Exteriores sirio acusó ayer a algunos Estados árabes de interferir en asuntos internos de Damasco y de intentar “matar” el plan de la Liga Árabe para recurrir a Naciones Unidas. Por su parte,La Ligaanunció que retirará de Siria a 55 de sus observadores, miembros de países del Consejo de Cooperación del Golfo (CGC), que decidieron dar punto final a la misión de comprobar si el gobierno de Bashar al Assad aplica el plan de paz propuesto por el organismo panárabe para terminar con la violencia. Por último, Damasco declaró que está determinado a combatir a los “grupos armados” responsables de sembrar el caos en el país.
“Algunos países árabes mataron el papel dela LigaÁrabe y acudieron ala Organizaciónde Naciones Unidas (ONU) para internacionalizar la crisis siria”, sostuvo el ministro sirio de Relaciones Exteriores, Walid al Muallem, en una rueda de prensa en Damasco. El canciller sirio dijo que su país rechazaba de ahora en adelante las “soluciones árabes”. Por otra parte, el ministro expresó que su país está considerando si acepta o no la extensión de la misión de observadores del organismo árabe. “Esa cuestión está bajo estudio e informaremos ala LigaÁrabe de nuestra decisión”, deslizó Muallem.
Representantes dela LigaÁrabe se reunían ayer en la capital egipcia para debatir sobre la misión después de que los países del Golfo decidieran retirar a sus observadores. Los Estados del Golfo decidieron retirar a sus observadores de Siria, informó ayer el Consejo de Cooperación del Golfo en un comunicado. Arabia Saudita anunció la medida el fin de semana pasado durante un encendido debate de la organización en El Cairo, argumentando que la operación en Siria no tuvo éxito.
La LigaÁrabe envió unos 160 observadores desde diciembre para vigilar la liberación de presos políticos y la retirada de los militares de los lugares emblemáticos de las protestas como Homs, Hama, Idlib, Dara’a y Deir as Saur, pero no lograron frenar la violencia, por lo que se desataron numerosas críticas.
Qatar y Arabia Saudita están presionando para que sea en el seno dela ONUdonde se resuelva el conflicto, si bien allí Rusia impidió hasta ahora que se tomaran medidas contra el gobierno sirio.
Por su parte, Amnistía Internacional reclamó ayer la intervención de Naciones Unidas y del Tribunal Penal Internacional, a partir de las violaciones de los derechos humanos descubiertas en Siria por la misión de observadores dela LigaÁrabe y los ataques a civiles del autodenominado Ejército Libre Sirio, compuesto por desertores.
En tanto, Siria declaró que combatirá a los grupos armados en el país.
“El gobierno sirio tiene el deber de decidir lo que es necesario hacer con esos grupos armados que siembran (el caos) en algunas provincias”, dijo Muallem. En tanto en Damasco, el Comité Sirio al que el presidente Al Assad encargó la redacción de una nueva Constitución para el país, decidió limitar el periodo presidencial a un máximo de dos mandatos de siete años.
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