Una mujer de 27 años y su pequeña hija de 4 fueron asesinadas a mazazos y puñaladas durante la mañana de ayer dentro de su casa de barrio Triángulo. Por el hecho fue apresado un sospechoso que había sido visto cuando abandonaba la escena del crimen por los fondos del inmueble. Tras la detención, la vivienda del muchacho apresado –ubicada a la vuelta de la casa de las víctimas– fue incendiada por los vecinos de la zona. Los voceros explicaron que el detenido había consumido estupefacientes antes de los homicidios.
Según informaron fuentes policiales, el hecho se registró ayer poco antes de las 8, en una vivienda ubicada en pasaje 1851 al 6600 (Provincias Unidas al 4000), en barrio Triángulo, adonde vivía una joven identificada como Laura López, de 27 años, junto a sus dos pequeños hijos de cuatro y seis años.
De acuerdo con los pesquisas, las personas que viven en las casa aledañas habían escuchado gritos, y poco después un vecino vio cuando un muchacho que vive en la misma manzana salía por una puerta ubicada al fondo del inmueble. “El muchacho ganó el patio trasero, trepó un alambrado y se escapó del lugar, pero como vive por ahí lo reconocieron”, explicó un vocero de la Unidad Regional II.
Los uniformados detallaron que, en ese contexto, el testigo se comunicó con el 911 y describió lo que había visto. Personal de la comisaría 19ª –que tiene jurisdicción en la zona– se presentó en la vivienda de la que había salido el muchacho y como nadie atendía la puerta ingresaron al inmueble. Allí encontraron, en el baño, el cuerpo sin vida de López. En tanto, en el ingreso del dormitorio, hallaron a su hija, Mía Valenzuela, de 4 años, sin signos vitales.
Según las fuentes, la mujer presentaba heridas punzocortantes en distintas partes del cuerpo, las mismas que presentaba la niña. Sin embargo, los voceros detallaron que la pequeña también había sido atacada a mazazos, ya que presentaba hundimiento de cráneo.
“El vecino que presenció la huída del sospechoso aportó su identidad e indicó a los uniformados dónde vivía”, dijo un pesquisa. Fue así que el personal policial se presentó en una casa ubicada en Espinosa al 6600 –a la vuelta de la casa de las víctimas– y detuvo a un muchacho que fue identificado como Jonathan Ezequiel O., de 20 años.
Para los pesquisas, las principal hipótesis indica que se trató de un hecho de tentativa de robo. Sin embargo, no descartan que el crimen haya sido cometido por otro motivo.
Luego de que el sospechoso fuera apresado, vecinos de la zona incendiaron su vivienda. El fuego fue controlado por los bomberos.
El caso es investigado por el Juzgado de Instrucción de la 2ª Nominación, en turno durante la feria, con la colaboración del personal de la seccional 19ª y de la Brigada de Homicidios.
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