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San Javier

Una fuga muy facilitada

Una joven de 26 años condenada por facilitamiento de prostitución fue detenida y alojada en la comisaría de San Javier. Pero los jefes, sin autorización judicial, le permitieron a la acusada irse a la casa de su madre. Y se escapó.


Una muchacha de 26 años que tenía una captura por privación de la libertad y promoción y facilitamiento de la prostitución desde marzo pasado, cuando la Cámara de Apelaciones ratificó una condena a 5 años de prisión, fue apresada el sábado pasado por el personal de la Tropa de Operaciones Especiales (TOE) en un boliche de la localidad de San Javier, en el norte de la provincia de Santa Fe. Tras el procedimiento, los uniformados de la TOE entregaron a la joven a los policías de la comisaría 1ª de dicha ciudad, quienes sin ninguna comunicación con el magistrado la liberaron para que se fuera a la casa de la madre, ubicada en la misma ciudad. Por esta causa, la Justicia busca –además de a la flamante prófuga– a otras dos personas. En tanto, la secretaría de Control de las fuerzas de seguridad dispuso un sumario administrativo con pase a disponibilidad para el jefe y subjefe de la dependencia.

La investigación para dar con el paradero de Barbie, una joven acusada de haber participado en un resonante caso donde toda una familia –dueña de una whiskería– retuvo y obligó a una adolescente a prostituirse, demoró un mes. En un operativo que ocurrió el sábado pasado a las 3.30 y estuvo autorizado por el juez de Sentencia 3a de la ciudad de Santa Fe, los uniformados apresaron a la joven en un boliche de la zona. La TOE llevó a la detenida a la seccional 1ª, de San Javier. Para las 15 de ese mismo día, la joven, identificada como Bárbara Guadalupe Trento, de 26 años y conocida como Barbie, había sido liberada para que fuera a la vivienda de su madre, ubicada en Núñez Burguez al 2200, de dicha ciudad cabecera del departamento.

En ese marco, el secretario de Control del Magistrado de Seguridad, Ignacio Del Vecchio, sostuvo que si el accionar de los policías de la seccional 1ª fue involuntario o directamente doloso, de cualquiera de las dos maneras es algo ilegal. “Voy a pedir un sumario con pedido de destitución. Esto es muy grave, porque ordenar algo sin la directiva del juez o del fiscal, realmente, debe ser penado con los más altos grados administrativos. Y obviamente penales también”, remarcó Del Vecchio.

Por su parte, en la causa judicial tanto el comisario como el subcomisario fueron indagados ayer por la mañana por la Justicia provincial para determinar responsabilidades en el hecho.

La causa

El 19 de septiembre de 2011, Aldo, padre de una joven de entonces 19 años, contó en una entrevista con LT9 que su hija estaba siendo retenida y obligada a prostituirse por su pareja. En su testimonio, el hombre describió que se enteró de que la joven estaba secuestrada en la casa de su nueva pareja y que iba a ser llevada ese fin de semana a Catamarca. Una vez que se hizo público, la Policía de San Javier allanó la vivienda donde la adolescente estaba encerrada junto a su hijo de cinco meses. Su supuesta pareja fue detenida y el local donde ofrecían sus servicios, que estaba habilitado como whiskería y se llamaba Oasis, fue clausurado por la Municipalidad.

La odisea de Aldo y su familia comenzó a principios de ese mes, cuando su hija cortó cualquier tipo de comunicación con ellos. Hacía un par de semanas que la víctima se había mudado con su pareja, un hombre 13 años mayor que conoció en un boliche. “El domingo (en referencia al 18 de septiembre) quise ubicar por teléfono a la pareja de mi hija, Gustavo Ojeda, alias Paco, y no me contestaba. El lunes siguiente estaba muy preocupado y al mediodía me comentaron que se la querían llevar secuestrada a Catamarca. Ahí hice la denuncia”, agregó el hombre en su declaración.

En la investigación, surgió que los testigos señalaban a Paco como el que obligaba a su pareja a prostituirse y la tenía encerrada bajo llave en una pieza de la casa que él alquilaba. Paco recibió una condena a 8 años de prisión por privación ilegitima de la libertad, por promoción y facilitamiento de la prostitución. En tanto, la Municipalidad de San Javier clausuró la whiskería Oasis, ubicada en Colonia Francesa, unos dos kilómetros al sur de la ciudad, sobre la ruta provincial 1, donde se probó que la joven era llevada y obligada a prostituirse junto con otras chicas.

Por esa causa, también quedaron detenidos otros tres integrantes de la familia de Ojeda entre los que se encontraba Barbie. El trío fue imputado por el mismo delito y siguió el proceso con libertad asistida hasta marzo pasado, cuando la Cámara de Apelaciones de Santa Fe confirmó la condena a 5 años de prisión efectiva para todos y solicitó las capturas.

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