Una caravana de autos, ambulancias y personal de salud despidieron ayer a la enfermera Miriam Soto, que falleció este lunes en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca), donde estuvo internada y también donde cumplía funciones. Había contraído coronavirus hace más de dos meses y paso ese tiempo internada.
Soto tenía 55 años y estuvo internada poco menos de dos meses en la guardia del Heca, efector en el que trabajó hasta contraer el virus. Trabajó en el lugar durante 30 años y tenía tres hijos. Sus compañeros del hospital saludaron con profundo dolor a la familia y manifestaron su necesidad de dar un último adiós a Miriam. Propusieron que para su despedida, el coche fúnebre pase por el Hospital Clemente Alvarez para ofrendarle un último aplauso. Eso ocurrió este martes, donde los trabajadores de la salud la despidieron con aplausos y flores.
Colegas del Hospital Centenario la recordaron con enorme tristeza y publicaron: “Cuando un/a Compañer@ fallece algo de nuestra historia se va con ell@s”.
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