Una balacera en Nuevo Alberdi que ocurrió durante la madrugada de ayer terminó con un joven de 19 años herido en el fémur y la muñeca. Los vecinos sostuvieron que esa noche un hombre a bordo de una camioneta blanca andaba por la calle a los tiros y que se escucharon más de cuarenta detonaciones. Atribuyeron el hecho a disputas entre dos barras de pibes del barrio.
Según el relato de una vecina de José Julián Pérez al 2400 (a la altura de Baigorria al 3100), el lunes a la 1.30 se empezaron a escuchar disparos que venían de la calle. Al asomarse, la mujer vio una camioneta blanca y al volante a un hombre con una pistola disparando contra el frente de las casas de la cuadra. En ese momento, en la vereda había varios grupos de pibes que, al sentir las detonaciones, corrieron y se metieron en los pasillos esquivando las balas. “Los voy a matar a todos, me tienen cansado”, gritaba.
El auto giraba en las esquinas, disparaba en otras calles y luego volvía a pasar por José Julián Pérez. En veinte minutos en la manzana se escucharon más de cuarenta tiros y producto de la balacera resultó herido Brian B., un chico de 19 años conocido en el barrio como “El Narigón”. El joven recibió dos impactos en la muñeca y el fémur y quedó internado en el Hospital Eva Perón, de Granadero Baigorria.
A los pocos minutos, llegó al lugar un móvil de la subcomisaría 2ª, con jurisdicción en la zona. Cuando el personal policial tomaba declaración de lo ocurrido, la camioneta blanca volvió a pasar y fue señalada por varios vecinos. En ese momento, comenzó una persecución que terminó en Álvarez al 2500, donde detuvieron a Cristian Gabriel C., de 37 años. Además, se secuestró la camioneta Pick up blanca, marca Ford, y una pistola nueve milímetros, mientras que en la cuadra de los hechos se encontraron vainas del mismo calibre.
Según fuentes de la investigación, el hombre de la camioneta es conocido en el barrio como “El Huguito” y se dedica a la reventa de ladrillos, aunque también fue vinculado al mundo delictivo. En la zona, atribuyeron la balacera de la madrugada de ayer a una pelea de larga data entre dos barras de pibes del barrio. El Huguito sería el suegro de un joven que hace un tiempo también anduvo por la cuadra disparando. “Los de J. Pérez se agarran todo el tiempo con otros que están a dos cuadras, siempre se escuchan tiros pero no tantos como anoche”, dijo un vecino que consideró mudarse por miedo a los constantes tiroteos.
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