Ciudad

Un buque quedó varado y bloqueó todos los puertos

Por Pablo Moscatello.- Es de bandera liberiana. Cargado al tope, encalló frente a Fighiera. Lo atribuyen a la bajante del Paraná.

Un gran buque de bandera liberiana se encuentra encallado desde hace dos días en el Paraná a la altura de la localidad de Fighiera. El hecho, por un lado, es una férrea  muestra de la fuerte bajante del nivel de agua del río, que en el puerto de Rosario  ya descendió a 1,80 metro de altura, registro que se ubica casi a la mitad de la altura media para el mes de enero. En tanto,  el infortunio también ya está comenzando traer algunas consecuencias económicas al afectar el comercio marítimo de la región. Es que la nave está obstruyendo casi en su totalidad la circulación en la hidrovía y por eso se frenaron todas las operaciones portuarias en la zona.
Según explicaron en contacto con este medio fuentes de la Prefectura Naval Argentina,  el buque en cuestión es el Aristeas-P con origen en Liberia, de unos 189 metros de largo y 28 de ancho. El mismo había zarpado desde la Terminal de Puerto General San Martín cargado de cereal.  Desde esa fuerza señalaron que la embarcación está varada desde el miércoles a la altura de la localidad de Fighiera, en el Kilómetro 390 del Paraná.
En la repartición se excusaron de otorgar información a la hora de ahondar sobre si existieron o no responsabilidades o posibles inconvenientes que haya sufrido el buque. Igualmente, una de las personas que ayer estaba trabajando en una de las dos embarcaciones remolcadoras que intentaban “mover” a la nave registrada en el páis africano para desencallarla explicó que los inconvenientes  se generaron “por la bajante del río”.  “Quedó encallado por eso. Rozó un banco de arena al querer esquivarlo previamente  y quedó con la mitad de la estructura de la embarcación prácticamente arriba”, confió la fuente.
De acuerdo a datos de la Prefectura, en el puerto de Rosario el nivel de agua del Paraná ya descendió a  1,80 metros un registro que se ubica casi a la mitad de la altura media para el mes de enero. Lo más bajo de los últimos tiempos se había dado en enero de 2009, cuando el río había alcanzado 1,50 metro, hecho que no había tenido antecedentes en la década.

Varado

En tanto, las mismas fuentes oficiales le explicaron a este medio que por el encallamiento se debieron suspender todas las operaciones portuarias en la región ya que el paso del transporte mercante se encuentra totalmente bloqueado tanto “hacía arriba como hacia abajo”. El buque impide el movimiento  de ese tipo de embarcaciones.
Según el portal de economía y negocios Punto Biz, hasta ayer era 20 los barcos cerealeros que no podían zarpar de las terminales del norte del Gran Rosario, especialmente de San Lorenzo, que concentra el mayor nivel de actividad. “Se están produciendo importantes demoras en las operativas portuarias de navegación y de logística ya que buques que finalizaron sus embarques no pueden zarpar como así tampoco pueden navegar los que en el Río de la Plata se hallan a la espera de poder ‘subir’ a los puertos”, agregó en contacto con ese medio Alberto Tello, del Centro Marítimo.
Al mismo tiempo, algunas de esas terminales portuarias también anunciaron la suspensión en el otorgamiento de cupos para la recepción de maíz y trigo  con destino a embarque (ver aparte). “Los puertos se hallan también terriblemente afectadas ya que no pueden cumplir compromisos, no pueden recepcionar las cargas de los miles de camiones que se hallan esperando para descargar y sufriendo otros perjuicios incalculables”, agregó el empresario.

El rescate

Desde prefectura explicaron que dos grandes buques remolcadores están por estas horas intentando “empujar” a la embarcación liberiana “sobre una de las bandas” para poder desencallarla. “Hay dos remolcadores porque con uno no alcanzaba. No son naves del tamaño del barco, pero son importantes, tienen mucha potencia”, sostuvieron desde la fuerza.
En tanto,  la fuente mencionada anteriormente que se encuentra trabajando en uno de los buques remolcadores explicó que la situación se originó porque la nave extranjera se “varó y se cruzó”. “Es como cuando un auto después de un accidente queda cruzado en la ruta e impide el paso”, graficó el joven, quien igualmente aclaró que sí pueden transitar por la zona las embarcaciones pequeñas e individuales.
A última hora de ayer no se descartaba incorporar una tercera nave remolcadora  para solucionar el inconveniente. Es que mientras se estaban desarrollando las tareas el joven explicó que a la embarcación carguera “al tirar se le cortó un cabo y se le enredó en la hélice”, lo que agravó aún más la precaria situación de la nave.
“Ahora además no tiene motor para navegar si logramos desencallarlo, con lo cual todo se complica aún más. Una vez que lo saquemos habrá que acomodarlo en algún lugar que no interrumpa el paso del canal. Y después habrá que resolver el problema de la hélice”, dijo el trabajador.
Los prefectos estimaban que “con suerte” el problema podría estar resuelto recién mañana. Sino, todo apunta a que habrá que esperar un par de días más para poder “mover” el inmenso Aristeas P.

Comentarios