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Cigarrillos

Trabajadores de una tabacalera reclamaron frente a la Afip: peligran 180 puestos de trabajo

El organismo no les otorga las estampillas para que pueda vender los cigarrillos, Acusan a un funcionario de complicidad con las grandes tabacaleras para evitar que vendan un atado a 49 pesos, un tercio del precio que cuestas otras marcas


Los trabajadores de la firma Bronway Tabaco SA se manifestaron este lunes por la mañana frente a la Agencia Federal de Ingresos Públicos (Afip) para denunciar que peligran 180 puestos de trabajo. Según explicaron, para poder fabricar los cigarrillos Pier y Dolchester y venderlos necesitan que el organismo le entregue una cantidad de estampillas. Pero eso no está ocurriendo, y la empresa responsabiliza a un funcionario del macrismo que todavía está en funciones por favorecer a las grandes marcas de tabaco, ya que estos cigarrillos cuestan un tercio del precio de los otros. Por ello recurrieron a la Justicia, donde presentaron un amparo y una denuncia contra el funcionario por abuso de autoridad.  Mientras tanto, los trabajadores cortaron la calle frente al organismo impositivo: “Si no les dan las estampillas no fabrican y van a cerrar. Y nos quedamos sin trabajo”, detalló uno de los manifestantes.

Ayer, los trabajadores, con sus equipos de seguridad antipandemia se manifestaron frente a la Afip, en Alvear al 100. Según explicó el vocero de los empleados, durante los 60 días de cuarentena obligatoria la fábrica estuvo cerrada y los trabajadores cobraron la totalidad de sus haberes. Pero ahora que la fábrica reabrió, no pueden producir porque no le dejan vender.

El abogado de la empresa, Martín Marini, explicó que para producir cigarrillos se necesita que la Afip entregue estampillas para poner en cada atado, ya que son instancias fiscales de control.

“El jefe de la Agencia es quien quedó del gobierno macrista y no nos quiere entregar las estampillas. No tienen sustento legal. Las estampillas se entregan, los cigarrillos se venden y se paga el impuesto al Estado”, destacó.

Y sostuvo que si bien desde hace tiempo tienen problemas con la entrega de estampillas, esta vez directamente no las reciben.

“El problema de las estampillas viene de años, ya que nunca le dieron lo que la empresa necesitaba, cuando los cigarrillos que fabrican son altamente populares por su precio”, marcó el letrado.

Un paquete de cigarrillos de la firma local puede costar en un quiosco 49 pesos. “Es un cigarrillo popular, y defienden a los monopolios al no dejarnos producir”, dijo uno de los manifestantes.

La empresa presentó una denuncia contra el funcionario por abuso de autoridad y ahora un amparo en la Justicia federal para poder fabricar. “Tenemos fe que en las nuevas autoridades se solucionen el problema ya que creemos que el gobierno nuevo apuesta a las pymes. Esta pyme no puede seguir soportando la falta de igualdad ante la ley -ya que esta situación, paradójicamente, no les pasa a los oligopolios- y los severos perjuicios causados por un funcionario sin atribuciones”, concluyó el abogado Marini.

 

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