El proyecto de una autopista entre Rosario-Rufino para la ruta nacional 33 sigue su avance. Casilda será mañana sede del último encuentro de una serie de consultas públicas que se vienen realizando rumbo a una segunda etapa de esta obra que tendrá unos 250 kilómetros de extensión, está valuada en 1.000 millones de dólares y de concretarse deberá reunir fondos del Tesoro nacional y créditos externos. La traza –una vez concretada– será de vital importancia para el tránsito en la zona Sur de la provincia. “Existen cuatro contratos de consultoría, cada uno encargado de un tramo de 60 kilómetros aproximadamente y en eso estamos trabajando”, señaló a este diario Rafael Pretto, jefe del distrito Santa Fe de Vialidad Nacional.
“Esta será la última de esta serie de reuniones. La primera se hizo en Rufino, la segunda en Venado Tuerto, la tercera en Firmat y ahora en Casilda. La autopista va a tener las mismas características que la Rosario-Córdoba, con dos calzadas, colectoras e intercambiadores cada cinco kilómetros. Estamos hablando de dos carriles por mano, con dos calzadas y banquinas internas y externas pavimentadas, cantero central y calles colectoras paralelas”, añadió el funcionario.
Sobre el costo, Pretto señaló que tendrá un valor cercano a los 1.000 millones de dólares. “Hay que considerar que en una obra de estas características el costo por kilómetro es de 25 millones de pesos. Tendrá dos formas de financiamiento, a través del Tesoro Nacional y de créditos externos. Por eso las consultoras están trabajando para luego diseñar los pliegos de licitación”, sostuvo.
Durante las consultas públicas, los funcionarios se reúnen con autoridades, vecinos y entidades de los distintos lugares para discutir sobre el megaproyecto y hacer aportes teniendo en cuenta la idiosincrasia de cada zona.
Según informan desde Vialidad Nacional –a través de los cuatro contratos de consultoría– estos estudios darán como resultado ocho pliegos para licitar en igual cantidad de tramos la construcción de los 250 kilómetros de la autopista.
Para esta etapa de consultas, Vialidad se encarga de evaluar y contestar por escrito cada una de las preguntas y requerimientos de los asistentes a las consultas. Así las cosas, sobre la base de las conclusiones técnicas, se determinará la traza de la misma. Definida esta etapa las consultoras avanzarán con la confección de los anteproyectos, los que una vez controlados y visados por Vialidad Nacional, desencadenarán en los proyectos ejecutivos de la obra.
Otro dato brindado oficialmente indica que la traza vendrá desde Venado Tuerto en forma paralela a la actual ruta 33 por el noroeste. Luego de cruzar la ruta provincial Nº 93 y Firmat, continuará hacia el este para trasponer por sobre la ruta 33, entre Firmat y Villada, y de allí continuar hacia Rosario pero por el sureste de la vía de comunicación existente.
En estos dos cruces se establecerán intercambiadores que oficiarán de acceso a Firmat. Asimismo, se construirá un intercambiador con la ruta nacional Nº 178, que la doble vía cruzará unos kilómetros al sur de la actual ruta nacional Nº 33.
Por otro lado, para minimizar las expropiaciones se seguirán en gran medida los caminos rurales ya establecidos y zonas de cañadas, con accesos desde el sur a Villada, Chabás, y Sanford, para el tramo expuesto que continuará hacia el tramo siguiente desde la zona de Colonia Las Flores.
Comentarios