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Otra etapa

Sanz no integrará el gabinete

En una carta difundida a través de las redes sociales, el titular del radicalismo anunció que por “cuestiones personales” no será ministro de Justicia en el gobierno de Mauricio Macri, como se había adelantado antes de las elecciones.


Con referencias a Nelson Mandela y a la recuperación democrática de 1983, el titular de la UCR nacional, Ernesto Sanz, anunció ayer que no va a ocupar “ningún lugar ni en el gobierno” de Mauricio Macri ni en su propio partido. Lo atribuyó a “cuestiones personales” y además afirmó que “se abre una nueva etapa” en el país en la que el radicalismo ha “recuperado la condición de partido de gobierno, que es mucho más que compartir un gabinete”.

Sanz comunicó su decisión ayer a la mañana, apenas unas horas después de haber celebrado el triunfo de Macri, a través de una carta que compartió por las redes sociales.

El presidente electo le quitó dramatismo al tema: “Me lo comunicó hace algunos días y me causó mucha tristeza, pero se debe a cuestiones personales”, dijo Macri, quien le había ofrecido a Sanz el cargo de ministro de Justicia.

En su carta, Sanz explicó que tras el balotaje del domingo “se abre una nueva etapa en la Argentina, apasionante, desafiante, llena de esperanzas y también de ansiedades” y aseveró que Macri “será el catalizador de un cambio positivo, no tan solo de rumbo hacia el progreso y desarrollo, sino un cambio más profundo y más intenso”.

Para el dirigente mendocino, actual senador nacional por su provincia, se abre también una “nueva etapa” para el radicalismo que “tiene derecho a festejar y a sentirse protagonista de esta hora especial”, y estimó que esa fuerza recuperó ahora la “condición de partido de gobierno que es mucho más que compartir un gabinete”.

“Cambiemos está lo suficientemente maduro como frente de gobierno para hacerse cargo de ese desafío y los radicales aportaremos todo lo que somos y tenemos para ese fin”, continuó el titular del radicalismo.

Según Sanz, la UCR se hizo cargo “del más importante desafío de la democracia recuperada en el 83: evitar la hegemonía del partido único, devolviendo al sistema las dos grandes columnas de la calidad democrática: equilibrio y alternancia”.

En el plano personal, Sanz también habló de “nueva etapa” y dijo que es “sin dudas” el “político argentino que acumula más días y noches fuera de su hogar en los últimos años”. “He decidido recuperar el espacio de hombre, que es el espacio de mis amores, de mi lugar en el mundo y también el espacio de sueños de vida que fui postergando mucho, demasiado tiempo, y que ha llegado la hora de concretar”, explicó.

En otro tramo de su carta, Sanz puso como ejemplo al fallecido líder sudafricano Nelson Mandela: “He elegido este camino porque, ante todo, soy todavía el dueño de mi vida. O, como repitió tantas veces Mandela de aquel poema Invictus de William Henley: Yo soy el capitán de mi alma”.

Aunque no vaya a formar parte del gobierno de Cambiemos, Sanz celebró la reestructuración de la UCR dentro del Frente Cambiemos: “Allí están los cientos de concejales, legisladores provinciales, intendentes, gobernadores y legisladores nacionales que conforman una fuerza ineludible e indispensable para gobernar la Argentina que viene. Cada uno desde su lugar es soldado de Cambiemos, el frente que construimos con pasión, visión estratégica y profunda vocación republicana”.

Sobre la gestión que inicia el 10 de diciembre, Sanz opinó que se trata de “una dirigencia política que no se cree fundacional ni omnipotente”. Y agregó: “Creo con todo mi corazón que Mauricio Macri y Gabriela Michetti serán el catalizador de un cambio positivo, no tan solo de rumbo hacia el progreso y desarrollo, sino un cambio más profundo y más intenso en aquello que no se ve a simple vista, pero que inunda a toda una gestión”.

Monzó, el hombre

Los diputados del PRO, la UCR y la Coalición Cívica pelearán para que la presidencia de la Cámara de Diputados quede en manos de un hombre de Cambiemos, el macrista Emilio Monzó, mientras por estas horas se negocian y se definen las autoridades de los bloques, con la incógnita puesta en la unidad o la ruptura de la bancada del Frente para la Victoria. Monzó, que junto a Marcos Peña se desempeñó como jefe de la campaña de Mauricio Macri, es mencionado como futuro presidente de la Cámara baja, cargo al que llegaría impulsado por el bloque del PRO.

Lilita: “No quiero nada, yo ya parí la República”

“No quiero nada. Yo ya parí la República”. En esos términos, la líder de la Colación Cívica Elisa Carrió anticipó que no formará parte del gabinete de Mauricio Macri ni ocupará cargos en otros organismos. “No tengo ninguna aspiración personal. Ya logré todo lo que quería en mi vida”, dijo Lilita el día después del triunfo de Cambiemos.

La jefa de la Colación Cívica no quiere cargos para ella, pero sí quiere participar de las designaciones. “Conozco el poder de adentro. Los cargos clave no están en los ministerios. Estoy trabajando por los cargos clave”, señaló Carrió.

Lilita ya rechazó la idea de ocupar el cargo de la actual procuradora Alejandra Gils Carbó y postuló como su reemplazante al fiscal José María Campagnoli. Gils Carbó, designada hace tres años y medio por impulso del Frente para la Victoria y con apoyo de la UCR, había dicho que no renunciaría si Macri resultaba electo. Pero el nuevo presidente la quiere fuera del cargo por su reconocida militancia K.

Carrió ya dijo que ella no quiere ser la nueva procuradora. Ayer lo ratificó: “Esta es una decisión del presidente y va a seguir siendo personal. Yo, si fuera presidente, elegiría a Campagnoli como procurador. Yo fui fiscal de la Nación durante 20 años y ahora no puedo, porque fui acusadora y si pasara a ser la procuradora, se entendería como una venganza”.

La chaqueña no dio demasiados detalles sobre su futuro político, pero dejó en claro que seguirá cerca del poder: “A partir de ahora voy a estar en la retaguardia, en la ayuda personal y política cuando me lo requiera el presidente electo. Yo no quiero nada. Yo ya parí la República y ahora ya está. Ahora hay que gobernar y hacerse cargo”.

La diputada nacional apuntó además a quienes la cuestionaron en agosto del año pasado cuando se retiró de un acto junto al senador de Proyecto Sur Fernando “Pino” Solanas y allí comenzó a partirse el ahora extinto frente Unen, que agrupaba también al socialismo, el GEN y Libres del Sur. “Me mataron porque quedé fuera de Unen, ahora dicen «qué bárbara la estrategia»”.

Mensajes de Santa Fe

El gobernador Antonio Bonfatti le deseó ayer “éxito” al presidente electo, Mauricio Macri, pero pidió “conocer cuáles van a ser las medidas” en materia económica a partir de diciembre. “Tan sólo eso. Si se trata de imaginar, uno puede imaginar muchas cosas, pero sería irresponsable si yo imaginara cuáles van a ser sus decisiones”, señaló.

“Espero que haya una escucha, un diálogo. Que Santa Fe se vea reflejada en el concierto de todas las provincias argentinas, que tenga igualdad de trato. Que reciba todo lo que se le debe, que es enorme en todo sentido. Después, que podamos contribuir entre todos a un país con más equidad, más posibilidades para los que menos tienen, con más derechos”, agregó el socialista. “Para nosotros el Estado es la garantía de los derechos de los trabajadores, de las minorías, de los que menos tienen, porque sin Estado no hay salud pública e igualitaria, sin Estado no hay educación, viviendas, ni la posibilidad de planificar un país donde la economía esté puesta para el desarrollo y en función de la pequeña y mediana empresa. Y podría seguir enumerando cosas; hablar del agua potable, de que sin Estado no hay justicia”, remató.

A su turno, el gobernador electo, Miguel Lifschitz, dijo: “Espero que Macri interprete el mensaje y que tengamos un escenario político de mayor diálogo, con más federalismo. Que las provincias tengamos otro protagonismo no sólo al momento de distribuir recursos o de asignar obras públicas, sino también a la hora de definir políticas macroeconómicas agropecuarias o industriales, tan importantes para la vida productiva de nuestra provincia”.

“Vamos a exigir un trato reparatorio por muchos años de haber sido discriminados. Lo que pretendemos es que Santa Fe pueda expresar sus demandas en términos de políticas productivas, sociales y para la lucha contra el narcotráfico. Es decir, de los grandes temas que dependen del gobierno nacional, pero que involucran a, o tienen fuertes impactos sobre nuestra realidad provincial”, añadió Lifschitz.

Por su parte, el intendente deSanta Fe, el radical José Corral, expresó: “Los radicales seremos el nexo entre la Nación y la provincia y vamos a ser la garantía para evitar cualquier giro conservador”.

“Nosotros, desde el radicalismo, somos parte del cambio. Vamos a tener que trabajar en esta concertación que es una novedad para el país. La idea es que nadie pierda ningún derecho”.

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