El ministro de Seguridad Marcelo Sain le pidió este mediodía la renuncia del jefe de la Unidad Regional II Daniel Acosta. En ese cargo asumirá Adrián Forni, ex jefe de la Tropa de Operaciones Especiales (TOE), quien se convertirá en el quinto designado en la cúpula de la fuerza en un año.
Las razones por las cuales el ministro tomó esa decisión se debe a una reunión que mantuvo el 9 de noviembre en la sede de la Unidad Regional II con dos “operadores políticos” a los que vinculan con senadores.
Sain tomó la decisión ya que sostiene que en las protestas policiales que se llevaron adelante como réplica de las que tuvieron en la provincia de Buenos Aires “hubo una mano negra agitando un levantamiento”. Y en ese sentido evaluó que estamos a fin de año, cuando suelen ocurrir este tipo de hechos, por lo que prefirió cortar de cuajo este tipo de problemas para evitar vinculaciones políticas con estos levantamientos.
Para Sain, la Policía no tiene que tener trato con la política, ya que esa es una función del Ministerio de Seguridad que es quien maneja las decisiones político institucional y no de la Unidad Regional II.
“Creemos que fueron a complotar, no hay ninguna razón para que dos operadores políticos se reúnan con un jefe policial, eso no va a pasar en la Policía que queremos”, sostuvo.
“Los legisladores tienen que dedicarse a legislar y si quieren conducir a la Policía que se postulen como gobernadores y ganen elecciones”, sostuvo.
Luego de enterarse de esa reunión, Sain y su equipo se reunieron con el resto de los jefes para indicarle una vez más cómo se manejan las cuestiones políticas de ahora en más.
En este marco, Acosta será reemplazado por Adrián Forni, ex jefe de las Tropas de Operaciones Especiales (TOE) y de la Unidad Regional con asiento en la ciudad santafesina de Reconquista. Forni será el quinto jefe de la Policía del departamento Rosario desde que asumió el gobierno Omar Perotti en la provincia de Santa Fe, en diciembre de 2019.
El primero, Marcelo Gómez, fue removido a los tres días de asumir por retirar en forma inconsulta las custodias fijas a inmuebles y domicilios judiciales que habían sido atacados a tiros.
Su reemplazante, el comisario Claudio Romano, tuvo una gestión de 23 días hasta que el ministro Sain decidió reemplazarlo en medio de una creciente cantidad de homicidios en enero de este año.
Acosta había asumido la conducción de la Policía rosarina, la más numerosa de la provincia, a finales de agosto pasado, para reemplazar al anterior jefe, Daniel Villán.
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