El presidente del bloque de diputados nacionales del Frente para la Victoria defendió el DNU sobre la intervención de YPF al considerar que “hubiera sido una tontería, una estupidez, dejar la empresa en manos de Repsol una vez anunciada la nacionalización” por parte de la presidenta.
El titular de la bancada kirchnerista defendió de esta manera la convalidación parlamentaria de los decretos que establecen la intervención de YPF y la designación del ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, y del viceministro de Economía, Axel Kicillof, al frente de la empresa petrolera.
“Cualquiera, hasta mi hijo de 11 años se daría cuenta que había que intervenirla, que no tenía lógica que la siguiera administrando quien en teoría iba a ser el perjudicado por la intervención”, expresó.
A continuación dijo que “ratificamos estos actos de nacionalización de YPF y que el Congreso pueda tratar estos DNU gracias a un mecanismo que existe desde que Cristina Kirchner era senadora”.
“Existieron otros decretos, menos felices, en otra época, que no tuvieron la posibilidad de ser sometidos a este tratamiento”, dijo el santafesino en obvia referencia a los decretos de los entonces presidentes Carlos Menem y Fernando de la Rúa, entre otros.
Agregó que “el mecanismo de los DNU permite al Poder Ejecutivo evaluar que es lo que amerita la necesidad y la urgencia” y se preguntó “qué hubiera pasado si demorábamos más en la discusión de la ley”, teniendo en cuenta que “hace poco nos enteramos que Repsol había anulado la venta de gas licuado”.
Sobre la decisión de nombrar al ministro Planificación, Julio De Vido, como interventor enfatizó: “Reivindicamos, desde el 2003 hasta hoy, la política energética de nuestro gobierno y llevada adelante por De Vido, por lo que nos parece razonable que la presidenta lo ponga en ese lugar”.
“Salvo que la oposición diga que a ese lugar tenían que ir el secretario de Cultura o el ministro de Salud”, ironizó el diputado.
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