Rosario, más solidaria que nunca. Así lo demostraron los casi 300 voluntarios que en la tarde de ayer se acercaron al Monumento Nacional a la Bandera con el propósito de ayudar en la colecta para los inundados de la ciudad de La Plata. La importante convocatoria dejó en evidencia el perfil participativo de los más jóvenes, como también la capacidad de compromiso con el dolor y la necesidad de las familias bonaerenses afectadas. La actividad fue organizada por la ONG Rosario Solidaria junto a otras organizaciones y continuará hoy, desde las 8, en Laprida 2129.
A pocas horas de comenzada la colecta se logró completar la carga de un camión. No obstante, según indicaron desde la mesa de registro de voluntarios, “había donaciones para llenar cuatro vehículos de similar magnitud”, lo que esperaban hacer al término de la tarde. Asimismo, indicaron que los artículos de mayor prioridad son: agua mineral, leche en polvo, alimentos no perecederos, artículos de limpieza e higiene personal, colchones, ropa de cama, frazadas y pañales.
“Hay que destacar, por un lado, el valor de la gente que viene, se suma, se pone el cartelito de voluntario y pregunta: ‘¿a dónde voy?’ Y, por otro, es increíble todo lo que están donando. No tengo palabras. Me doy vuelta y cuando vuelvo a mirar llegan paquetes y bolsas con cosas, es increíble”, dijo Jorgelina de La Torre, de Rosario Solidaria. “Es una convocatoria ciudadana en la que no hay diferencias de religión o política y en donde todas las instituciones aportan. En este momento somos nada más que argentinos”, dijo Norma, una voluntaria que desde hace varios años dedica parte de su tiempo a participar en acciones solidarias de distinta índole. La mujer, que conoce el desarrollo de este tipo de actividades, se mostró sorprendida por el trabajo de los más jóvenes: “Son un ejemplo en todo momento y no he visto ningún lugar en donde no esté la juventud trabajando, de manera organizada”, enfatizó.
Si bien la convocatoria fue realmente importante por la cantidad de rosarinos que se acercaron a colaborar en la separación y recepción de las donaciones, una de las referentes de la ONG Fundación Caminos dijo que “hubiese sido importante más ayuda gubernamental, sobre todo la presencia del Ejecutivo local brindando recursos humanos”. Sin embargo, nada empañó el trabajo de los jóvenes que desde las primeras horas de la tarde se dividieron por sectores y clasificaron y embalaron toda clase de elementos.
Respecto al control sobre la entrega de las donaciones De La Torre explicó que “hay un seguimiento” de los elementos que son enviados a la provincia de Buenos Aires. “Tenemos contacto permanente con los choferes y una vez que llegan a destino son recibidos por Banco de Alimentos que trabaja directamente con Cáritas. Las cosas llegan a un centro de acopio y de allí son distribuidas”.
Por su parte, Laura Borghi, ex presidenta del Hogar del Huérfano y colaboradora de la actividad, destacó que lo que se trata de hacer es discriminar, seleccionar y rotular las donaciones y tratar de cubrir todos los flancos posibles para que las cosas salgan de la manera correcta. “Cáritas, Cruz roja o Banco de Alimentos son todas organizaciones que saben en dónde está la necesidad y por eso nosotros lo que hacemos es tender un puente entre el que da y el que va a recibir”, finalizó.
En tanto, los elementos recibidos en la colecta que organizó el club Rosario Central también fueron llevados al Monumento Nacional a la Bandera ayer por la tarde. De este modo, descargaron un colectivo lleno de donaciones que fueron enviadas a La Plata al término de la jornada. “Hay que destacar la colaboración del personal del club, de los socios y de toda la gente que se acercó a dejar artículos de toda clase en los dos días que duró el operativo”, dijo el vocero de la institución auriazul, Jorge Forte, quien estimó que de la actividad en el Gigante participaron unos 100 voluntarios.
Autopista
El viaje de Buenos Aires a La Plata es corto y se realiza a través de la autopista. Y ese trayecto logró emocionar a más de un automovilista que ayer vio ese tramo colmado de camiones que viajaban con ayuda desde distintos lugares del país. Una forma muy argentina que no deja de emocionar.
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