Un joven de 27 años reconoció en una audiencia de procedimiento abreviado haber matado a otro a mediados de 2020 en barrio Godoy, de la zona oeste. Según la acusación, el imputado le sacó un celular a la víctima y cuando ésta le reclamó, le pegó un certero puntazo en el cuello que le provocó la muerte casi en el acto. La Fiscalía y la defensa presentaron un acuerdo que terminó en condena cuando el juez actuante Mariano Aliau homologó el convenio.
Eran pasadas las 6 del 20 de junio de 2020 cuando Carlos Brian “Bola” Lugo, de 23 años, fue hasta la cuadra de Eduardo Isern al 7300 donde estaba un vecino para exigirle que le devolviera el celular que le había robado. En ese contexto, se generó una discusión entre Lugo y el acusado, identificado como Iván Alejandro Oro, quien decidió terminar los entredichos cuando sacó un arma blanca entre sus ropas y le pegó una puñalada, describió el fiscal Ademar Bianchini en su acusación.
Estaba con un grupo, uno le sacó el celular, forcejeó y terminó muerto por un puntazo en el cuello
La herida fue en el lado izquierdo del cuello de la víctima, quien falleció en el lugar. El agresor se dio a la fuga en un Chevrolet Corsa negro aunque ese mismo día y a las tres horas se entregó en la comisaría 32ª y terminó detenido.
Oro fue imputado en ese entonces donde le dictaron la prisión preventiva por el plazo de ley y este martes, tras una audiencia de procedimiento abreviado donde admitió su responsabilidad en el crimen, fue condenado por el juez Aliau a la pena de 8 años de cárcel que propuso el fiscal de Homicidios Bianchini junto a la defensa del acusado por el delito de homicidio simple.
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