Ciudad

Protesta

Resiste la clausura

Un hombre que dijo ser dueño de un after-bar que no tiene habilitación se encadenó por tres horas a una banca de la sala de sesiones del Concejo.


Un hombre que dijo ser titular de un after-bar que el fin de semana pasado fue clausurado por octava vez al no estar habilitado se encadenó ayer en una banca del recinto de sesiones del Concejo Municipal. El hombre pidió que le extendieran el plazo para regularizar la situación administrativa por la “necesidad de trabajar” y de no tener dónde residir ya que, dijo, el comercio es también el lugar que habita. La particular protesta duró casi tres horas y se levantó luego de que los concejales radicales María Eugenia Schmuck y Sebastián Chale le gestionaran una entrevista con un funcionario municipal para esta mañana.

El presunto propietario del bar-after Soul se identificó como Fabián Pérez. Ingresó pasado el mediodía al Palacio Vasallo y fue directo hacia el recinto de sesiones. Allí su ubicó en la primera banca que encontró (la de Schmuck) y se ató con una cadena a la altura de la cintura.

Cuando El Ciudadano llegó al lugar, pasadas las 14, el hombre estaba solo, muy nervioso. En los pasillos, los pocos empleados que aún se encontraban en el Concejo no salían de su asombro y espiaban por detrás de las puertas.

Pérez explicó que el after fue clausurado el fin de semana luego de que algunos vecinos protestaran por ruidos molestos. Se quejó por la presunta violencia con la que se efectuó el operativo en el comercio ubicado en San Martín 1471.

Cerca de las 3 de la tarde entraron en escena los concejales radicales Schmuck y Chale, quienes le pidieron que depusiera su actitud. Lo consiguieron sólo después de asegurarle que le habían conseguido una reunión para hoy a las 9 con el director de Habilitación de Comercio e Industria del municipio, Rodrigo Gutiérrez, a quien podrá explicarle su situación.

Situación irregular

La Secretaría de Control y Convivencia desmintió las denuncias que formuló el hombre que se encadenó en el Concejo. “El lugar funciona en horarios prohibidos, no posee habilitación ni inició ningún trámite; tiene once clausuras y tenemos más de una decena de denuncias de vecinos”, afirmó Pablo Seghezzo, titular del área, quien luego indicó: “Desde el 27 de junio a la fecha se registraron más de diez denuncias, tiene abierto un expediente administrativo y recibió una clausura y 10 reimplantes que fueron violados con rotura de faja”, expresó.

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