Comenzaron los primeros fríos en la cuidad y muchas personas utilizan artefactos para calefacciones ambientes que no están no están preparados para esas funciones como son las cocinas o que no tienen las conexiones e instalaciones reglamentarias lo que hacen que la combustión que generan en un ambiente cerrado puede provocar accidentes domésticos graves e incluso la muerte.
El sábado un hombre de 60 años falleció producto de una intoxicación por haber inhalado monóxido de carbono en una vivienda ubicada en 9 de Julio al 400. Una mujer de 58 años que estaba con él tuvo que ser trasladada al hospital para recibir atención.
Carlos Rusi, jefe de siniestros y Vanesa Giménez, jefa del cuartel , ambos de Bomberos Zapadores de Rosario dieron este martes una conferencia de prensa detallando algunas recomendaciones para prevenir accidentes por intoxicación por monóxido de carbono.
“Hay que controlar los artefactos para calefacciones y ventilar adecuadamente los ambientes ya que el gas emanado por una mala combustión puede provocar accidentes domésticos graves”, dijo Rusi.
Además recomendó no utilizar las cocinas ni lo hornos para ambientar a temperaturas más altas que las externas y afirmó que en el último siniestro el horno se encontraba abierto. “Está todo en materia de investigación de todos modos”, aseguró al ser interrogado sobre los detalles de la tragedia que se cobró la vida del hombre de 60 años.
“Hay que verificar los artefactos, realizar un mantenimiento preventivo para que al momento de utilizarse sea de manera segura. Controlar las salidas al exterior , realizar todos los controles técnicos”, aseveró y recordó es primordial una buena circulación de aire para no enviciarlo.
En las cocinas, si se prenden las hornallas hay que verificar que la llama sea azul, sino indica una mala combustión”, dijo.
Por su parte, la jefa del cuartel explicó que ante cualquier mareo hay que abrir ventanas y puertas. “El tema es que no se puede percibir por los sentidos, genera dolor de cabeza, desmayo y automáticamente viene la muerte”, señaló.
“Ante el primer dolor de cabeza, hay que ventilar el aire” concluyó y agregó que el daño es grave y rapidísimo y está relacionado con la contextura física, el estado de salud y la edad (en niños pequeños más rápido el daño ante la intoxicación por monóxido de carbono).
Monóxido de carbono
El monóxido de carbono es altamente venenoso, no tiene color, olor ni sabor y es casi imposible detectarlo por nuestros sentidos. Es provocado por la combustión incompleta de gas natural, el gas licuado, el kerosene, el carbón, la leña, la gasolina -motores de combustión-, madera, papel y aceite, entre otros.
Ocasiona daños en el sistema nervioso central, provocando asfixia y consecuencias irreversibles, y en caso de concentraciones muy altas, puede provocar la muerte de la persona. Los síntomas de una intoxicación aguda son: confusión, mareos, dolores de cabeza, zumbido de oídos, nauseas, vómitos, palpitaciones, parálisis, convulsiones, coma.
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