El gobierno de Santa Fe concretó un pago de 89 millones de pesos para reactivar la obra de mantenimiento y reparación del sistema de defensa de la capital provincial y localidades vecinas ante la crecida del río Paraná y mitigar el impacto del fenómeno “El Niño”, informó este domingo lunes el ministro de Obras Públicas, Lisandro Enrico.
“Se efectuó un nuevo adelanto de 89 millones de pesos, además de los 167 millones entregados previamente, para continuar con los trabajos que se ejecutan en la ciudad capital, San José del Rincón, Arroyo Leyes, Recreo y Santo Tomé”, indicó Enrico a través de un comunicado.
En ese sentido, añadió que “el secretario de Recursos Hídricos, Nicolás Mijich, estableció contactos con la empresa a cargo de los trabajos para coordinar el reinicio de tareas y se acordó continuar con el mantenimiento y reparación de las defensas, de las estaciones de bombeo y los reservorios”.
“A su vez, se hará hincapié en las labores de acopio de suelo, limpieza de canales y desobstrucción de desagües urbanos, puntualmente en Arroyo Leyes, San José del Rincón y la ciudad capital”, detalló Enrico.
El funcionario explicó que “el Gran Santa Fe tiene 135 kilómetros de terraplenes” y anticipó que se hará “foco en asegurar el funcionamiento de las estaciones de bombeo con la incorporación de 20 tableros y la compra de siete electrobombas, con todos los equipos necesarios”.
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“Entre las primeras tareas, apuntamos a que se priorice la limpieza de reservorios y las líneas de drenaje, trabajos más que necesarios para afrontar el impacto de las altas precipitaciones que se vaticinan en este verano”, precisó Enrico.
El gobierno provincial reseñó que “esta megaobra hídrica se había adjudicado a la unión transitoria de empresas (UTE) conformada por las empresas Coemyc S.A., Cocyar S.A. y Ángel Boscarino Construcciones S.A., en el mes de octubre pasado, por más de 2490 millones de pesos”.
La ciudad de Santa Fe, a través de una ordenanza aprobada por el Concejo Municipal, se declaró en emergencia hídrica debido a la crecida del río Paraná, que obligó a la evacuación de un grupo de familias que residen en La Vuelta del Paraguayo, zona situada en el este del sector urbano.
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