Un recurso natural vital y preciado como el agua formará parte de la mesa de todos los comensales, a partir de la ordenanza que aprobó el Concejo Municipal anteayer, en la que se establece la disposición, “en beneficio de clientes, de agua segura de red, gratuita y libre en jarras u otros receptáculos en establecimientos gastronómicos, bares y restaurantes habilitados de la ciudad de Rosario”. La iniciativa, impulsada por Aníbal Fascendini, a cargo de la Cátedra del Agua de la Universidad Nacional de Rosario, resultó aprobada por unanimidad en el Palacio Vasallo, y la adhesión será voluntaria hasta el 8 de diciembre de 2016 a partir de lo cual el llamado “Derecho de Jarras” será de cumplimiento obligatorio.
“La ordenanza está basada en el proyecto de la Cátedra del Agua; el derecho al agua es un derecho humano y si bien hemos avanzado en alguna normativa faltaba esta obligación para que los locales ofrecieran agua potable de forma gratuita y obligatoria. Se hace en la mayoría de los lugares del mundo, Rosario dio un paso más en ese sentido”, señaló la concejala María Eugenia Schmuck, quien recibió el proyecto y le dio curso e impulso dentro del Palacio Vasallo. El proyecto ya había recibido el apoyo de Aguas Santafesinas y la Defensoría del Pueblo, el Ministerio de Trabajo, el Arzobispado de Rosario, el Club Rosario Central, Defensoría de Niñas, Niños y Adolescentes, la Asamblea por los Derechos Sociales y de la intendenta Mónica Fein.
Dado que es requisito para la habilitación de los locales gastronómicos contar con conexión de agua potable, a partir de este jueves, cualquier cliente de un bar o restaurant podrá solicitar una jarra de agua en su mesa, siendo ésta de libre acceso y sin restricción de cantidad alguna.
Por el momento, la adhesión a la normativa será voluntaria pero a partir del 8 de diciembre de 2016 comenzará a regir una sanción por su incumplimiento. “Los locales tienen la obligatoriedad para su habilitación de tener conexión al agua potable de red. La ordenanza va a ser implementada en forma voluntaria durante un año, correspondiente al plazo de transición hacia la total ejecución. A partir del 8 de diciembre del año próximo, se modificará el Código de Faltas y se extenderá una multa a quienes no cumplan la ordenanza”, advirtió Schmuck.
Consultada acerca de los cuestionamientos que empresarios del rubro gastronómico expresaron en relación con la pérdida de ingresos que la normativa representa, la concejala radical descartó el argumento y, en contrapartida, destacó el acceso al agua como un derecho: “Creo que cuando un cliente va a consumir tiene estipulado gastar determinado monto de dinero y si toma agua potable, esa diferencia de precio la gastará en un postre o en otro café o en algún otro comestible. No tiene ningún asidero el argumento de que van a perder dinero. El agua potable es un complemento de otra bebida. Es un derecho que tenemos como seres humanos de acceder gratuitamente a ella y el agua mineral es otro producto como la gaseosa”.
Por su parte, el titular de la Cátedra del Agua de la Universidad Nacional de Rosario, Aníbal Fascendini, se mostró satisfecho con la aprobación del denominado “Derecho de Jarras” y advirtió que la próxima etapa es de concientización y difusión para que los dueños de bares y restaurantes accedan a su implementación.
“Desde la Cátedra del Agua venimos trabajando esta idea desde hace más de un año en distintos ámbitos. Estamos agradecidos al Concejo y a todos los que por unanimidad lo votaron. Lo vemos muy bien, congeniamos con lo que se aprobó. Nos pone contentos porque fue una creación académica que pudimos ponerla al servicio de la comunidad. Ahora la Cátedra hará un proceso de visibilización, concientización y difusión para que los dueños voluntariamente accedan. Una jarra no se le niega a nadie, estamos hablando de agua”, señaló Fascendini, al tiempo que propuso entregar certificados a aquellos locales que adhieran voluntariamente a la normativa, y recordó que el comedor Balcarce (ubicado en Brown y Balcarce) ya recibió el primer “certificado de reconocimiento”.
“Queremos invitar a los clientes a que se pongan en contacto con nosotros si los dueños se niegan a brindarles agua potable. Este Derecho Humano de Jarra no va a generar pérdida económica, sino que el empresario va a colaborar con el bien común”, agregó el titular, quien puso a disposición el mail catedradelagua @yahoo.com.ar para que la gente se comunique en reclamo de su derecho.
Fascendini advirtió además su intención de extender el proyecto a otras regiones de la provincia y nivel nacional: “Lo vamos a plantear en el Poder Judicial para que la gente tenga acceso al agua de canilla cuando haga trámites, y que si no tiene dinero tenga acceso a agua potable libre y gratuita. También estamos hablando con el diputado Eduardo Seminara para hacerlo en otras ciudades de la provincia y a nivel nacional”, concluyó.
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