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Policía preso por asesinato

Un agente de 25 años confesó en sede policial haber matado a Sebastián Tedesco, cuyo cuerpo mutilado fue hallado anteayer en un relleno sanitario. Dijo que lo hizo durante una pelea por motivos económicos.

“Fue un homicidio”. Esa fue la confirmación que dieron los investigadores acerca del cadáver calcinado que fue encontrado anteayer al mediodía en un basural de la zona oeste. Ayer, el cuerpo fue unido a un nombre: Sebastián Tedesco, de 31 años. Según indicaron las fuentes, la causa de la muerte fue un golpe en la cabeza, a pesar de que además el cadáver –que fue encontrado sin piernas ni cadera– presentaba algunos cortes y se hallaba completamente quemado. “Todo ocurrió casi al mismo tiempo: encontramos el cadáver, se halló la moto de la víctima y su familia realizó la denuncia por su desaparición”, detalló un vocero. En la tarde de ayer fue detenido, durante un allanamiento en una vivienda de Santa Fe al 5100, el cuñado de la víctima, un policía de 25 años que estaba con carpeta médica, quien confesó el hecho en sede policial –dijo que se produjo durante una pelea por motivos económicos– y hoy será indagado por la jueza de Instrucción Alejandra Rodenas, a cargo de la investigación. El cuerpo de Sebastián Martín Tedesco, de 31 años, fue encontrado anteayer al mediodía por un ciruja que revisaba basura en un relleno sanitario perteneciente a la empresa Suman, ubicado en Presidente Perón (ex Godoy) al 8000.

Según contaron vecinos de la zona, el ciruja comenzó primero a tirar de un cable que estaba atado en el otro extremo a algo pesado. Una primera ojeada le hizo pensar que se trataba de un maniquí, pero cuando estuvo lo suficientemente cerca se dio cuenta de que en realidad era un cadáver.

La identidad que correspondía a ese cuerpo no fue revelada hasta ayer, cuando los investigadores detallaron que se trataba de Tedesco. “Ocurrió todo junto: en jurisdicción de la (comisaría) 32ª levantamos el cuerpo; en se mismo momento los familiares de Tedesco realizaban la denuncia por su desaparición en la seccional 13ª; y en jurisdicción de la sub 21ª encontraron la moto”, explicó un vocero cercano a la investigación.

El padre de Tedesco no tiene el mismo apellido de su hijo. Se llama Alí G., tiene 56 años, y el miércoles poco después del mediodía, se presentó en la comisaría 13ª de barrio Bella Vista para denunciar que Sebastián se encontraba desaparecido desde el día anterior.

De acuerdo con el relato que Alí hizo a la Policía, Sebastián se había ido de su casa cerca de las 19.20. Salió en su motocicleta, una Kawasaki Ninja negra de 650 centímetros cúbicos, y dijo que iba a la casa de su cuñado Maximiliano I. (de 25 años y novio de su hermana), para reclamarle un dinero que le debía. Fue la última vez que lo vieron.

Acerca del hallazgo de la motocicleta, que fue secuestrada cerca de las 14 en barrio 7 de Septiembre, hay versiones encontradas. Una indica que vecinos de la zona llamaron a la subcomisaría 21ª para avisar que el rodado estaba abandonado. La otra apunta a una empresa de rastreo satelital que dio a los uniformados el dato de dónde se encontraba la moto: Ayala Gauna y González del Solar. Sea como fuere, la moto estaba allí, tenía la llave puesta y fue secuestrada con una orden de allanamiento.

“Al tomar conocimiento de los tres hechos empezamos a atar cabos y así fue como la víctima fue identificada”, explicó un vocero. Según los resultados preliminares de la necropsia realizada al cuerpo de la víctima, a pesar de que el cadáver presentaba cortes en el cuello y en el pecho, y se encontraba completamente calcinado, lo que le quitó la vida habría sido un golpe en el parietal izquierdo.

Deudas y sospechas

Maximiliano I. tiene 25 años, es policía y cumplía sus servicios en la ciudad de Santo Tomé. Sin embargo, desde hace un tiempo está con carpeta médica a causa de una enfermedad. Es hijo de otro policía de alto rango que estuvo a cargo de los Bomberos Zapadores y hoy es el principal responsable del Depósito Judicial de la Unidad Regional II.

De acuerdo con los investigadores, Maximiliano estaba de novio con la hermana de Tedesco, que no lleva el mismo apellido.

Fue tras el relato de los familiares de la víctima que el policía se convirtió en el principal sospechoso y por este motivo es que ayer el joven fue apresado en su casa de Santa Fe al 5100 por personal de la Brigada de Homicidios. Más tarde, confesó el hecho en sede policial, indicó una alta fuente de la investigación.

“La familia dice que hacía rato que estaba esta deuda, pero a pesar de que todos coincidían que no era mucho dinero (unos 2 mil pesos), nadie pudo decir por qué la habían contraído”, deslizó un vocero que explicó que una de las versiones indicaba que ambos tenían un emprendimiento económico juntos, aunque no se sabía de qué naturaleza. Lo que aportaron los familiares de la víctima es que hasta hace un tiempo el fallecido trabajó en el casino y luego se dedicó a vender ropa femenina.

Esta misma fuente detalló que dentro de la vivienda allanada, al igual que en el auto del imputado, se encontraron manchas de sangre que serán sometidas a pruebas químicas para determinar si pertenecen o no a Tedesco.

También se investiga si la víctima realizó viajes a América del Norte y Europa y si estos estaban relacionados con el emprendimiento que tenía con el presunto asesino.

En base a estos indicios es que se construyó una de las hipótesis: que la muerte de Tedesco haya ocurrido dentro de la vivienda, donde también pudo haber sido quemado, y que luego el cuerpo haya sido descartado en alguna pila de basura o container de la zona oeste, que luego fuera trasladado por la empresa de recolección de residuos hasta el relleno sanitario adonde fue encontrado.

Según los pesquisas, tras confesar “con un pormenorizado relato” la autoría del crimen en sede policial, hoy Maximiliano I. iba a brindar declaración ante la jueza de Instrucción Alejandra Rodenas, que investiga el hecho. Ahora, la investigación policial pasó de la Brigada de Homicidios a manos de la División Judiciales, puesto que el imputado es un empleado de la fuerza.

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