Ciudad

Harina floja

Pan blanco, trabajo en negro

Entre junio y agosto pasados, el Ministerio de Trabajo de la provincia hizo 111 inspecciones en panaderías de la ciudad y constató que el 52,5 por ciento de los empleados, 207 en total, estaba en forma irregular. De ellos 72 fueron blanqueados.


El pan de cada día viene con más de la mitad de los que lo amasan trabando en negro. Así se confirmó en forma directa por parte del Ministerio de Trabajo de la provincia, que presentó ayer los resultados de las inspecciones laborales en la industria panadera de Rosario.  En total, desde junio y hasta el pasado 31 de agosto, se realizaron 111 inspecciones en el sector, las que relevaron la situación de 395 trabajadores, de los cuales no estaba registrado el 52,5 por ciento. Es decir 207 trabajadores estaban en forma irregular.

El titular de la cartera laboral, Julio Genesini, encabezó la reunión de la Comisión Tripartita que integran la Sociedad de Obreros Panaderos de Rosario, la Asociación de Industriales Panaderos y el Ministerio de Trabajo. En ese marco volcó las cifras que resultaron de las inspecciones, que se hicieron “con el fin de avanzar en la registración laboral de los trabajadores panaderos, así como en líneas de acción en materia de salud y seguridad”.

Funcionarios del Ministerio marcaron que, “en función de los plazos legales que tiene un empleador para exponer la documentación correspondiente” luego de una inspección, “fue regularizada hasta la fecha la situación del 34,50 por ciento de los trabajadores relevados”. Es decir 72 empleados que trabajaban en forma irregular ahora lo hacen con todas las de la ley.

“La importancia de este operativo de fiscalización es que se hace a instancias del sindicato y con la participación de la cámara de empleadores industriales de la panificación; eso es muy importante porque es un tema que se encara en forma tripartita y habla de la responsabilidad de todos los actores”, explicó el ministro Genesini. “Dada la coyuntura, se evaluó también la preocupación de los industriales por la retracción de la demanda, de cara a la necesidad de sostener los puestos de trabajo. Por esto se acordó seguir evaluando la situación en conjunto. A partir de ello se armó una agenda de trabajo hacia el futuro”, agregó el funcionario.

En ese marco, Genesini resaltó el valor de la mesa tripartita: “Reuniones de este tipo nos permiten evaluar, discutir las cosas que hay que corregir y ver la intensidad que hay que darle a este tipo de tareas”, remarcó.

De hecho el más de un centenar de inspecciones se realizó después de que se reunieran las partes en junio pasado, donde se trazó una hoja de ruta para relevar situaciones laborales en el sector.

En ese marco, tanto los representantes gremiales como los industriales destacaron la relevancia del espacio: “Ratifica el compromiso de todos los actores para la formalización de los trabajadores, como así también la necesidad de que todos los establecimientos se encuadren bajo las normas legales existentes”, reconocieron los representantes de los empresarios panaderos.

Mesa y masa de a tres

El encuentro de la mesa tripartita de la industria del pan y las facturas se realizó en la sede de la Asociación Obreros Panaderos de Rosario y participaron del sindicato, representantes de la Asociación de Industriales Panaderos y Afines y funcionarios.

Por la cartera laboral, además del ministro Genesini, estuvieron el subsecretario de Fiscalización del Trabajo, Fernando Muruaga, y la directora de la Regional Rosario del Ministerio de Trabajo, María Belluccia. Por la parte gremial participaron el secretario general y el adjunto de la Sociedad de Obreros Panaderos, Mario García y Eduardo Franco; y, por la parte empresaria, concurrieron el presidente de la Asociación de Industriales Panaderos, Gerardo Di Cosco, junto con Jorge Vitantonio  y Juan Carlos Sandrone, de la comisión directiva.

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