La Justicia federal obligó al Pami a cubrir los gastos médicos de dos procedimientos para eliminar el tumor de una mujer que se realizan sólo en efectores privados. La segunda práctica, bajo el nuevo método de cirugía con resonancia, se haría el martes en Buenos Aires debido a que el aparato existente en Rosario no funciona. También evalúan demandar a la obra social de los jubilados por abandono de persona ya que cuando le diagnosticaron el mal, le dieron el turno “urgente” con un neurocirujano para 30 días después.
A principio de esta semana, la jueza Sylvia Aramberri, a cargo del Juzgado Federal de 1º Instancia Nº 2, dio lugar al pedido de una mujer de 67 años para que la obra social Pami se haga cargo de los costos de dos procedimientos para eliminar un tumor alojado en la parte frontal izquierda de la cabeza. Se trata, en primer lugar, de un estudio de Resonancia Magnética Tres Tesla con tractografía, tal su nombre, que debe complementarse –si lo indica el médico tratante– con una biopsia estereotáxica. Esto, para determinar con certeza la estirpe del tumor –benigno o maligno– y en base a ello planificar la cirugía y el tratamiento. En segundo lugar, una cirugía bajo resonancia magnética intraoperatoria, que hoy se realiza únicamente en la Clínica Adventista Belgrano de Buenos Aires.
Según el fallo, hace cuatro meses que la salud de la mujer acusa un progresivo deterioro a consecuencia de un tumor localizado en la parte izquierda de su cerebro. El abogado de la mujer, Luciano Tamous, reseñó el periplo que debió transitar la paciente antes del diagnóstico correcto de su padecimiento. “Hasta le dijeron que era psicológico”, deslizó el letrado a modo de ejemplo. El tumor le ocasionó a la mujer parálisis total del brazo derecho, dificultad en el habla, principio de parálisis facial y un cuadro de depresión. De acuerdo con el letrado, el tumor se detectó en abril. En ese momento, uno de los médicos del Pami le otorgó un turno para un neurocirujano, pero recién para fines de mayo. Este hecho es evaluado por el abogado como causal de una demanda contra el instituto, por abandono de persona: se hizo caso omiso a la presunción de un mal grave y se retaceó la inmediata atención que requería el cuadro.
Método novedoso
Según los considerandos del reclamo de la mujer, está demostrado que si se consigue extirpar el tumor en un porcentaje superior al 90 por ciento, la extensión y calidad de vida de la paciente serán sensiblemente superiores en comparación con las simples biopsias estereotáxicas o parciales.
“Como lo demuestran infinidad de trabajos, con la cirugía convencional sólo se logran extirpaciones de 6 al 12 por ciento. En cambio, con la resonancia intraoperatoria se alcanza en un 90 por ciento de los casos a retirar todo el tumor y no se compromete el tejido sano”, detalla el pedido. Sin embargo, la realidad indica que la cirugía bajo resonancia intraoperatoria se practica en pocos lugares de Latinoamérica a razón de la poca cantidad de equipos. Y en la Argentina sólo hay dos máquinas: una en el Ipam (empresa privada de medicina prepaga ubicada en Sarmiento y Gaboto) y otra en la Clínica Adventista, ubicada en Buenos Aires y operada por el doctor Roberto Herrera. La orden de la Justicia derivó el tratamiento al instituto porteño porque el aparato local está roto hace más de 40 días.
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