Pablo Soria
María Alejandra tiene 44 años y vive en barrio Granaderos, en el extremo noroeste de Fray Luis Beltrán. Barriada humilde, de casas bajas y calles angostas de tierra. Durante un mes y medio, entre marzo y abril de 2016, trabajó como empleada doméstica en la casa de Darío M., el hombre que se hizo tristemente célebre esta semana, a partir de un video que se viralizó en redes sociales en el que lo escracharon cuando ahorcaba a uno de sus perros, en el patio de su vivienda de Mitre al 900 de dicha localidad. Dos años atrás, ella también fue víctima de la violencia del hombre en cuestión, cuyo caso de maltrato animal se mantiene pendiente de imputación por parte de la Fiscalía de San Lorenzo.
En abril de 2016, María Alejandra realizó una denuncia policial en la Comisaría 4ª de la Unidad Regional XVII, con jurisdicción en Fray Luis Beltrán. Según consta en la presentación, hacía un mes y medio que trabajaba en la casa y cuidaba de Rosa, la madre de Darío. Aquella noche había tenido que ir a trabajar acompañada por su hija que por entonces tenía 5 años.
El irascible hombre le recriminó a María Alejandra que se le había escapado un perro. “Estaba borracho y de forma muy violenta comenzó a golpearme con una manguera, insultándome a mí y a mi hija en todo momento, echándome de la casa y diciéndome que no vaya a trabajar más”, refiere la denuncia por violencia de género.
El miércoles, Darío M. fue escrachado por 300 vecinos en la puerta de su propia casa en Mitre al 900, mientras se desarrollaba el operativo de rescate de seis mascotas -cinco perros y un gato- que vivían en el domicilio. Los animales fueron entregados a integrantes de la ONG “Fray Luis Beltrán proteccionismo independiente”. Permanecen bajo guarda transitoria a la espera de una resolución judicial: si son dados en adopción o vuelven con su dueño.
Como el delito es excarcelable, Darío M. recuperó la libertad tras haber sido “fichado” y permanecer demorado el miércoles por la noche en la Comisaría 4ª. Todavía no hay fecha de celebración de la audiencia imputativa en los Tribunales de San Lorenzo.
El caso de maltrato animal adquirió trascendencia pública a partir de un video filmado por un vecino que se viralizó en redes sociales, en el que se lo observa a Darío M. ahorcando a un perro mestizo con una soga atada a un árbol. El cuerpo del animal no fue hallado, en una causa que investiga el fiscal Juan Carlos Ledesma.
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