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Murió al ser atropellado por un avión fumigador

La víctima había estado tomando mates con el aviador, quien fue internado por una crisis nerviosa.

La avioneta quedó secuestrada en la empresa de fumigaciones.
La avioneta quedó secuestrada en la empresa de fumigaciones.

Un hombre de 63 años murió en el atardecer del sábado tras ser embestido por un avión fumigador que era piloteada por un amigo de 38, cerca de Rufino, en el departamento General López. Los dos hombres habían estado tomando mates hasta un rato antes en un hangar cercano y luego el menor de los dos retomó su labor mientras que su amigo se fue a pasear unos perros por un camino rural, donde fue chocado por la aeronave.

Alrededor de las 18, Juan Carlos Álvarez, de 63 años, apareció por la empresa de fumigaciones Bauer, a visitar a su amigo Walter B., de 38, quien esa tarde estaba fumigando campos en la zona, confiaron fuentes policiales.

Según fuentes policiales, ambos estuvieron charlando sentados afuera de uno de los hangares, hasta que alrededor de las 19 el menor dijo que iba a subirse a la avioneta, una Ranquel 230, para fumigar un campo de la zona.

En tanto, su amigo decidió salir a caminar por un camino rural cercano junto a dos perros que había llevado en su auto, explicaron voceros del caso.

Por causas que se tratan de establecer, cerca de las 19.30 la avioneta, que ya había fumigado el campo cercano, apareció sobre el camino rural y en un momento la nave descendió y chocó a Álvarez, quien cayó gravemente herido y murió minutos después.

En tanto, su amigo Walter pudo controlar la aeronave y bajó tras realizar varias maniobras, en la pista de la empresa de fumigaciones, ubicada a unos 2 kilómetros del lugar del accidente.

El piloto bajó rápidamente de la avioneta, se subió a una camioneta y fue hasta el camino rural, pero cuando llegó encontró a su amigo sin vida.

En el trayecto llamó por teléfono a un servicio de emergencias, pero cuando llegaron su amigo había fallecido, confiaron fuentes del caso.

El piloto tuvo que ser derivado a un centro médico de Rufino tras sufrir una crisis de nervios, donde quedó internado en observación.

En tanto, el cuerpo de Juan Carlos Álvarez fue trasladado a la morgue judicial de Venado Tuerto por orden del Juzgado de Instrucción en feria, para que se realice una necropsia, cuyo resultado se presume estará en la mañana de hoy.

Los pesquisas investigan también si el hecho ocurrió cuando el piloto se dirigió hasta donde iba caminando su amigo y descendió con la aeronave para hacerle una broma.

Walter debió realizar un aterrizaje de emergencia, ya que la avioneta chocó a Juan Carlos con una de sus ruedas, que quedó desestabilizada, confiaron voceros policiales.

La aeronave quedó secuestrada en el hangar de la empresa fumigadora, con custodia policial, hasta que peritos de Fuerza Aérea Argentina se hagan cargo de la aeronave, ya que serán ellos quienes realicen las pericias para determinar las causas del siniestro.

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